¿Qué tienen que ver las relaciones con Marruecos, Pedro Sánchez, Luis Planas y la esposa de este último? Pues bastante más de lo que pueda parecer. De entrada, Marruecos es el vecino más problemático que tiene España. Tradicionalmente, el primer viaje de cada nuevo presidente del Gobierno español era a Rabat, en un gesto de buena voluntad.
Publicidad
Sánchez debe considerar que ya tiene seguro este puesto otra vez y ha decidido adelantarse a los acontecimientos, largándose de vacaciones a Marraquech. Han precisado desde La Moncloa que se trata de un viaje privado y que don Pedro ha corrido con los gastos. Si ellos lo dicen será verdad, como también lo es que el erario público español deberá hacer frente a los costes adicionales generados, como pagar los gastos de los escoltas, porque no creo que Pedro Sánchez vaya a viajar sin protección de españoles, dejando la seguridad en manos solo de los marroquíes.
Este viaje se produce después del espinoso asunto del cambio en la posición española sobre el Sáhara, a favor de las tesis de Rabat, y de la polémica sobre los móviles de varios miembros del Ejecutivo, incluidos los del propio Sánchez, del ministro del Interior, Marlaska, y de Agricultura, Luis Planas, que habrían sido espiados mediante el sistema Pegasus. Existen sospechas a nivel español y europeo de que detrás pudiera estar de forma directa o indirecta Marruecos. Y, llegados a este punto, ¿qué pinta Planas en este asunto? Pues resulta que el ministro de Agricultura en funciones fue embajador político de España en Marruecos con Zapatero. Resulta, además, que Planas tiene una casa (palacete según algunos de los que la han visitado) en el vecino país, según figura en su declaración de bienes presentada en el Congreso; el inmueble estaría situado en Xauen. Y resulta que Planas, por la cuenta que le trae, sigue manteniendo estrechas relaciones con la embajada de Marruecos en España, como prueba el hecho de que fue uno de los pocos ministros invitados a la fiesta que tuvo lugar en ella el pasado domingo, según consta en la agenda oficial que se facilitó a los medios.
Y, ¿qué pinta en todo esto la esposa de Planas, María Jesús Herrera? Pues resulta que esta última fue nombrada, sin saberse muy bien sus méritos, como responsable de la Misión en España de la Organización Internacional de Migraciones (OIM) de la ONU. Este nombramiento tuvo lugar en mayo de 2011, todavía con Rodriguez Zapatero en el poder. Cuando Rajoy se instaló en la Moncloa, y gracias a las buenas relaciones de Planas con el PP, se mantuvo en este puesto, pagado con dinero público, a María Jesús Herrera. Actualmente sigue disfrutando de esta «canonjía». Y, ¿cuál es uno de los principales problemas que hay entre España y Marruecos? Pues el de las migraciones, que entra dentro de las competencias de la esposa de Planas. Sin embargo, está última no ha dicho ni mu en los últimos años sobre este espinoso asunto.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.
