¿Qué ha hecho Planas por Salamanca?

Gran pregunta: ¿qué ha hecho Luis Planas por el campo de Salamanca en estos seis años y tres meses que lleva al frente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación? Pues, sigo pensando. Así llevo una semana, desde que me puse a ello, y no encuentro medidas de envergadura adoptadas por don Luis y sus «mariachis». Pienso por aquí, cavilo por allí y nada, que no encuentro nada. Pero ¿cómo va a ser posible que no haya ni una sola acción a favor? Por más vueltas que doy a la cosa, no logró una sola de cierta entidad. Me voy al siguiente paso y busco las decisiones y medidas puestas en marcha por el todavía ministro, bien por acción o por omisión contra el sector agrario de Salamanca. Lo de las omisiones es importante porque don Luis y sus «mariachis» son muy dados a las omisiones, es decir, a pasar de todo, a mirar para otro lado, a ponerse de perfil, a no tener ataques de laboriosidad o a ejercer de vagos, por decirlo claramente. Y ahí si que encuentro la tira de omisiones, de las que ya se ha dado cuenta en numerosas ocasiones, aquí, en las páginas de LA GACETA. Me voy a centrar solo en la última: ¿cuánto tiempo tardaron en reaccionar desde el Ministerio de Agricultura cuando hace un año se agudizaron los problemas de la EHE, asunto clave para la economía agraria de la provincia de Salamanca? Pues lo que quisieron y más. Pasaron meses y meses y, además incumplieron sus promesas, como las que realizó el año pasado en la inauguración de Salamaq.

Imagino, dada la prepotencia y la soberbia del sanchista Planas que estará muy enfadado porque desde la Diputación no hayan tenido a bien invitar al señor ministro a la inauguración de este año. Y andará dando vueltas a ver si lo logra a última hora. Quizás por eso en esta ocasión desde los servicios de propaganda del Ministerio no hayan enviado la agenda semanal de don Luis para la actual. Lo suelen hacer todos los viernes o sábados. Sin embargo, en esa ocasión, nada de nada. Quizás están esperando a que decida presentarse a última hora, aún sin contar con invitación oficial. Y es que don Luis estaba encantado con venir a Salamanca, ya que así tenía la excusa perfecta para cenar la noche anterior con la familia que vive aquí y, luego, ya por la mañana, se daba un paseo por el recinto ferial y aprovechaba su intervención para vender unas cuantas «burras», y que me perdonen estos nobles e inteligentes animales por haberlos utilizado. Si alguna crítica hay que hacer a los responsables de la Diputación es que hayan pecado de «lilas» y hayan tardado tanto tiempo en darse cuenta de que Luis Planas, el peor ministro de Agricultura para Salamanca en mucho tiempo, utilizaba su presencia en la Feria para beneficio personal y para hacer política, anunciando medidas que luego incumplía sistemáticamente. ¡Uhmm, …. continúo pensando y sigo sin encontrar medidas de Planas a favor del campo de Salamanca! Pero mi ánimo no decaerá y persistiré en mi empeño.