MBA: la formación para convertir un perfil técnico en directivo

El ascenso hacia posiciones directivas es una gran motivación para muchos trabajadores que en la actualidad cuentan con un perfil técnico, y tienen el objetivo de alcanzar un puesto como directivo a medio – largo plazo. En este contexto, las escuelas de negocios se esfuerzan en resaltar sus cualidades de relevancia con el objetivo de atraer a los estudiantes más cualificados a sus programas MBA. No obstante, ¿En qué medida han experimentado transformaciones los planes de estudio y el perfil de los estudiantes de los MBA?

Los programas Máster en Administración de Empresas(MBA) son una elección de formación avanzada preferida y muy popular entre aquellas personas que buscan una educación especializada en el ámbito empresarial. Dentro de la diversidad de instituciones que ofrecen esta formación, en nuestro país los centros ubicados en Madrid lideran en cuanto a MBAs. Los Masters MBA de ESADE, IESE, ESIC, IE Business School o de la Cámara de Comercio de Madrid, son los programas de referencia que eligen los profesionales que aspiran avanzar hacia roles directivos en empresas de cualquier sector.

A nivel local, la escuela de negocios IME Business School de la Universidad de Salamanca es un referente de la ciudad para cursar esta formación. Ofrece un MBA pensado para todo tipo de perfiles, incluidos los técnicos, diseñado con un enfoque práctico, que proporciona el carácter aplicable que se demanda en el actual mercado laboral.

Pero, ¿qué obtienen los perfiles con una formación técnica tras su paso por un MBA? Según las fuentes consultadas en uno de los mejores Máster en Administración de Empresas en Madrid, organizado por la Cámara de Comercio, «los alumnos con un perfil técnico estudian un MBA porque experimentan una transformación profunda. A lo largo del curso desarrollan una nueva perspectiva sobre la empresa, la razón de ser de las cosas y la importancia de colocar a las personas en el centro de los negocios. Este conocimiento no sólo se siente y se aplica, sino que también abre los ojos a la realidad actual de las empresas».

De esta forma, todos aquellos profesionales que buscan redefinir su posición más allá de su especialización técnica o funcional actual encuentran en un MBA la palanca para acelerar su trayectoria profesional mediante el desarrollo de habilidades directivas.

«Los Masters MBA están en constante proceso de transformación«, declaran los responsables de la organización y admisión del MBA de la Cámara de Comercio de Madrid. Subrayan que el MBA ha evolucionado hacia una mayor versatilidad. Ya no está reservado exclusivamente para ejecutivos de grandes corporaciones, sino que ha ganado relevancia y espacio entre aquellos profesionales con perfil técnico inmersos en emprendimientos, tanto fuera como dentro de una organización, independientemente de si las compañías pertenecen al sector privado o al sector público. Además, en esta nueva era de la formación directiva, los objetivos de los alumnos van más allá del ascenso en la jerarquía corporativa, evidenciando un creciente interés por el emprendimiento, la innovación así como la ambición de liderar startups propias en sectores dedicados especialmente al desarrollo y transformación con base tecnológica.

En respuesta a estos cambios, las escuelas de negocios han adaptado sus programas MBA para abordar las nuevas demandas del mercado. La heterogeneidad de perfiles en los MBAy la diversidad de áreas de las que proceden, ha sido la causa que ha llevado a los Master in Business Administration a incluir nuevos temas y actualizaciones en los programas académicos.

Por ejemplo, en los mejores MBA la digitalización es un tema transversal en todas las materias, y se han incorporado asignaturas específicas en data analytics, business intelligence y tecnología aplicada a la gestión de empresas.

Otro aspecto muy demandado por los perfiles técnicos que estudian un MBA son las asignaturas obligatorias que abordan innovación, negocios digitales y nuevos emprendimientos. Además, en los programas académicos se incluye un trabajo final de máster que implica la elaboración de un plan de negocio. «Es muy frecuente que los temas elegidos sean para potenciar una startup o crear desde cero una empresa orientada con base tecnológica o, al menos con un fuerte componente tecnológico en su actividad», detallan en el MBA de la Cámara de Comercio de Madrid.

De manera análoga, los estudiantes provenientes de áreas no relacionadas con los negocios optan por participar en programas MBA con el propósito de desarrollar habilidades interpersonales y fomentar el pensamiento estratégico. Ejemplos de esto son ingenieros, abogados y otros profesionales de la salud (médicos y psicólogos), quienes por lo general dedican los primeros años de su carrera a actividades técnicas. Sin embargo, conforme avanzan en responsabilidades y temáticas laborales, sienten la necesidad de adquirir conocimientos en las distintas áreas funcionales de una empresa, abarcando aspectos financieros, operativos, de marketing y estrategia comercial así como recursos humanos.

De acuerdo con los especialistas consultados para este artículo, indican que las clases presenciales mantienen su atractivo al proporcionar oportunidades de networking y colaboración profesional. Aunque la demanda de clases online continua en aumento.

Las ventajas que ofrece la presencialidad son incuestionables. Numerosos estudios afirman que el aprendizaje en el aula es más efectivo en este tipo de formación especializada que busca la inmersión de los participantes en el mundo de la dirección de empresas. Además, la interacción entre los estudiantes, el intercambio de experiencias y el debate de ideas son más enriquecedores de manera presencial. Por esta razón, cada institución adopta en cierta medida formatos híbridos para eliminar las distancias geográficas y compatibilizar los horarios de sus alumnos, sin perder de vista el valor añadido de la presencialidad.

Un aspecto destacado en los últimos años, especialmente en la era post pandemia, es la conexión más estrecha del MBA con la industria de la salud. La urgencia de profesionalizar el sector de la salud se ha hecho aún más evidente, especialmente después de superar una pandemia que colapsó completamente el sistema en la mayoría de los países. «Observamos un aumento significativo de profesionales de la salud, como médicos, odontólogos y psicólogos, provenientes de disciplinas altamente vinculadas a las ciencias de la salud. Esto se debe a que algunos perfiles tienen una formación muy enfocada en un campo específico, dejando de lado por completo el ámbito de la administración de empresas. Es plausible que en el ámbito médico existan profesionales que, desde su formación en las ciencias de la salud, busquen desarrollar habilidades que les permitan gestionar las entidades donde prestan sus servicios», coinciden en explicar desde varias escuelas de negocios con amplia experiencia en la formación de cuadros directivos.

Por otro lado, los ingenieros basan su interés en estudiar un MBA para dar un giro significativo en su trayectoria profesional. Además de mejorar las habilidades como ingenieros, también amplían la perspectiva del negocio en el que se desenvuelven. Con el paso por un MBA, buscan la posibilidad de agregar un mayor valor a la organización en la que trabajan como resultado del perfil altamente competitivo que supone esta titulación.

Un MBA ofrece una formación que abarca una amplia gama de técnicas y herramientas del ámbito del marketing, estrategia, toma de decisiones, comunicación, trabajo en equipo y gestión de recursos humanos, entre otras. Esta formación es completamente diferente y complementaria a las aptitudes adquiridas en la universidad, permitiendo a un trabajador con un perfil puramente técnico destacarse y explorar nuevas dimensiones en su perfil profesional, dirigiendo su carrera hacia áreas de dirección que quizás no las había considerado previamente.

• Temas
• Educación