

Secciones
Destacamos
Viernes, 24 de diciembre 2021, 16:13
Los observables, tanto directos en superficie como procedentes de los sistemas de vigilancia, siguen corroborando los signos de agotamiento del proceso eruptivo del volcán de La Palma, aunque el final de la erupción no tiene por qué implicar el final de algunos peligros asociados al fenómeno volcánico ni el final de la reactivación magmática en Cumbre Vieja.
La directora del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en Canarias y portavoz del Comité Científico, María José Blanco, informó en rueda de prensa que para poder decir que el proceso eruptivo está finalizado, los datos registrados y observables se deben de mantener en los niveles actuales durante un día más.
Por su parte, el director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, apuntó que sigue habiendo zonas “muy calientes” a poca profundidad de la “costra” de las coladas, toda vez que las cámaras térmicas han registrado algunos puntos en los que se han alcanzado temperaturas superiores a 180ºC.
Miguel Ángel Morcuende también ha insistido en que se sigan manteniendo todas las precauciones en materia de COVID-19 para evitar nuevos contagios. Además, volvió a indicar que las personas que entren en las zonas evacuadas para limpieza de cubiertas o recogida de enseres deben tener mucha precaución, ir siempre acompañados y ventilar bien las viviendas, evitando lugares bajo rasante.
Preguntado por cuánto tiempo más estará vigente el Pevolca tras el fin de la erupción, Miguel Ángel Morcuende apuntó que el Plan seguirá vigente mientras perduren los problemas generados para las personas por la desgasificación y la circulación de gases nocivos, sobre todo por tuberías y cañerías. Asimismo, incidió en que todavía queda una fase de rehabilitación de servicios esenciales que habrá que seguir implementando. En cualquier caso, avanzó que el consejero de Presidencia, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias y director del Pevolca, Julio Pérez, informará mañana sobre este asunto.
La emisión visible de gases volcánicos sigue siendo puntual y esporádica, concentrándose en la zona de los centros eruptivos y en los jameos de los tubos volcánicos. En las paredes de los cráteres del cono principal y secundario se producen continuos pequeños derrumbes a favor de fallas y fisuras existentes.
El tremor está a nivel del ruido de fondo. La sismicidad, que es de baja magnitud, está en niveles muy bajos en todas las profundidades. Pese al nivel de sismicidad actual, no se descarta la ocurrencia de sismos sentidos. Respecto a deformaciones, sin tendencia en todas las estaciones de la red, tras revertir totalmente la deformación en la estación de Jedey (LP03).
La emisión de dióxido de azufre (SO2) a la atmósfera por el actual proceso eruptivo en Cumbre Vieja fue baja durante el día de ayer. Las tasas de emisión baja y muy baja no están relacionadas con ascenso magma, sino con un proceso de solidificación del magma superficial existente en los conductos del centro eruptivo.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Sigues a E.P.. Gestiona tus autores en Mis intereses.
Contenido guardado. Encuéntralo en tu área personal.
Reporta un error en esta noticia
Necesitas ser suscriptor para poder votar.