El Papa Francisco será dado de alta este domingo tras 37 días ingresado en el Hospital Gemelli de Roma

El Papa Francisco recibirá el alta médica este domingo, 23 de marzo, tras 37 días ingresado en el Hospital Gemelli de Roma. Según los médicos, su estado es «clínicamente estable».

«El Santo Padre regresará a Santa Marta con un alta protegida», anunciaron los doctores en una comparecencia pública este sábado. También destacaron que, aunque su vida estuvo en peligro, «nunca fue intubado».

Antes de su traslado a la residencia de Santa Marta en el Vaticano, está previsto que el Papa se asome a la ventana del Hospital Gemelli a la hora del Ángelus para saludar a los fieles, según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

Los médicos reiteraron que el Papa Francisco «siempre se mantuvo alerta y orientado» y que, tras recibir el alta, deberá seguir con su terapia parcial y tomarse al menos dos meses de convalecencia y descanso.

El Pontífice fue hospitalizado el 14 de febrero debido a una insuficiencia respiratoria aguda provocada por una infección polimicrobiana. Durante su internamiento, sufrió varios problemas de salud, incluida una grave neumonía bilateral.

«La vida del Santo Padre estuvo en riesgo», explicaron los especialistas. «Gracias a las terapias farmacológicas, el suministro de oxígeno de alto flujo y la respiración mecánica no asistida, logró una lenta pero progresiva recuperación que le permitió superar los momentos más críticos».

El Papa Francisco ya ha comenzado con la fisioterapia respiratoria y los médicos confían en que, en poco tiempo, pueda retomar su actividad habitual. Sin embargo, recomiendan que se tome un período adecuado de reposo y convalecencia.

«La neumonía bilateral afecta los pulmones y los músculos respiratorios, lo que puede causar pérdida de voz», explicaron. «En los últimos diez días ha mostrado una mejora significativa».

El doctor Sergio Alfieri, del Hospital Gemelli, destacó que en pacientes de edad avanzada y con problemas respiratorios crónicos, «la última fase de la recuperación ocurre mejor en casa».

«Puede sonar paradójico, pero el hospital es el peor lugar para la convalecencia, ya que aumenta el riesgo de infecciones», afirmó. También aclaró que el Papa «no es diabético», desmintiendo rumores sobre su estado de salud.

En la última semana, la recuperación del Papa Francisco ha sido más rápida, y si esta tendencia continúa, podría retomar sus actividades en poco tiempo.

El 16 de marzo, casi un mes después de su hospitalización, el Vaticano difundió la primera imagen del Papa desde su ingreso. En la foto, tomada esa misma mañana, se le veía de espaldas, sentado en silla de ruedas y revestido para la misa en la capilla de su habitación.