Historia de Santa Lucía, patrona de Cilleros de la Bastida

A finales del siglo III, en el año 281, viene al mundo en Siracusa (capital de Sicilia en Italia) una niña a la que bautizan con el nombre de Lucía y que, desde muy pequeña, destaca por su fervor y piedad cristianos.Sus padres, Lucio y Eutiquia, pertenecían a la nobleza de Siracusa. Lucía pierde a su padre siendo ella todavía una niña de 5 años. Su madre, Eutiquia, educó a Lucía en el cristianismo y desde que era una adolescente, decide consagrar su vida a Dios y rechaza la proposición de matrimonio de varios jóvenes siracusanos.Su madre, enferma desde hacía varios años, pidió a su hija Lucía que la acompañara a visitar el sepulcro de Santa Águeda, en Catania (otra región de Italia), para pedirle su curación. Mientras Lucía oraba en el sepulcro, se le apareció Santa Águeda, rodeada de ángeles, y le dijo: “Lucía, virgen de Dios, ¿por qué me pides lo que tú misma puedes hacer?. Tu fe ha alcanzado respuesta y tu madre está curada”. Lucía contó a su madre la visión que había tenido y desde entoncesEutiquia no volvió a insistir en la boda de su hija. Eutiquia, a petición de su hija, vende todos sus bienes y los reparte entre los pobres. Esto hace sospechar que es cristiana; sospecha que luego confirma la denuncia, por despecho, de su prometido ante Pascasio, gobernador de Diocleciano en Sicilia. Pascasio la mandó llamar y, viendo que ella se negaba a adorar a los Dioses Romanos, ordenó que fuera llevada a un prostíbulo. Con este propósito pusieron a Lucía en un carro, pero los bueyes que tenían que tirar del carro no lograron moverlo del sitio. Entonces, el Gobernador Pascasio, lleno de odio, manda que quemen viva a la joven Lucía, pero las llamas de la hoguera no le hacen daño. Al ver este tipo de cosas milagrosas que sucedían, muchas personas se convertían al cristianismo y entonces, el Gobernador, mandó que le sacaran los ojos pero ella seguía viendo y al final ordena al verdugo que le cortara la cabeza. El martirio de Lucía se produjo el 13 de diciembre del año 304. Fue enterrada en las catacumbas de Siracusa y desde allí sus reliquias se distribuyeron a distintas iglesias del mundo.Se le representa normalmente con una espada que le atraviesa el cuello, una palma, un libro, una lámpara de aceite y en ocasiones también con dos ojos en un plato y, desde tiempos inmemoriales, se le considera patrona de los ciegos y abogada de los problemas de la vista y también de los pobres y de los niños enfermos.Actualmente sus restos se veneran en su Iglesia de Venecia a la que acuden cada año miles de peregrinos.El cuerpo de Lucía fue depositado en las Catacumbas de Siracusa y desde entonces se le consideró una Santa Mártir. Su culto se fue extendiendo a otros lugares, de América, África, Europa y España, hasta llegar a Cilleros de la Bastida.Desde muy antiguo se le considera la protectora de la vista y fue elegida para ser la patrona de los ciegos. La fiesta de Santa Lucía se celebra el 13 diciembre.Para leer más publicaciones enviadas por los vecinos de Cilleros de la Bastida pulse aquíPuedes subir aViva mi Pueblo las fotografías e información de este u otros municipios salmantinos o mandandarlas a vivamipueblo@lagacetadesalamanca.es