Fallece a los 94 años el ganadero Alipio Pérez Tabernero Sánchez

Luto en el Campo Charro, que llora la marcha de uno de sus ganaderos legendarios, uno de los referentes de la historia en la cría del toro bravo: Alipio Pérez Tabernero, que murió este martes a los 94 años de edad. Don Alipio era el quinto de los seis hijos de don Alipio Pérez Tabernero Sanchón, descendiente a la vez de don Fernando Pérez Tabernero, que fue el patriarca de una larguísima saga que durante más de un siglo dio renombre a la cría de reses bravas en Salamanca.En la década de los 50, Alipio Pérez Tabernero Sánchez se vistió de luces como novillero, llegando a torear en escenarios de la importancia y la categoría de La Maestranza de Sevilla o La Glorieta de Salamanca. En ésta, la última tarde hizo el paseíllo junto a primerísimas figuras del momento como Antonio Ordóñez y Manolo Vázquez, estoqueando una novillada con el hierrro y la divisa de Graciliano Pérez Tabernero. De ahí en adelante fue habitual su participación en asolerados festivales taurinos, entre ellos el de las Hermanitas de los Pobres que cada año se celebraba en el coso salmantino.Ganadero de cuna de una de las familias señeras y más importantes de la historia del Campo Charro, a partir de la década de los 60, y hasta los 90, Alipio Pérez Tabernero Sánchez alcanzó su esplendor como ganadero, fundamentalmente con las reses de procedencia Santa Coloma -que heredó de su padre y que siempre fueron su gran debilidad y su principal ilusión- y posteriormente con productos de Atanasio Fernández. Ambos encastes los compaginó en un momento en el que Salamanca y su Campo Charro estaba entre la élite de la cría del toro bravo.Alipio Pérez Tabernero Sánchez se casó con la ganadera María Lourdes Martín y tuvo dos hijos, Alipio y Juan Pérez Tabernero que también se dedicaron a la ganadería. Tras jubilarse su padre, Alipio Pérez Tabernero Sánchez se quedó con el hierro original de la familia y con los productos santacolomeños, además de la propiedad, entre otras, de tres las fincas señeras de la casa y del campo bravo salmantino: Matilla, Arevalillo y Coquilla. Además del toro bravo, Alipio Pérez Tabernero Sánchez tuvo un gran imperio de tierras, donde además del toro bravo se dedicó a la cría de yeguas españolas, charolés y morucho. En cuanto al bravo se refiere, de su ganadería, habitual en las ferias de aquellas décadas, era el toro ´Guapito´ con el que el maestro Santiago Martín ´El Viti´, tomó la alternativa en Las Ventas de Madrid el 13 de mayo de 1961. En la Feria de Salamanca se hizo acreedora del prestigioso ´Toro de Oro´ en el ciclo de 1980.Este miércoles, el funeralEl funeral tendrá lugar hoy a las 13:00 horas en la Iglesia de San Pablo y el entierro este jueves a las 11 de la mañana en el panteón familiar de El VIllar de los Álamos.