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C.R.
Miércoles, 2 de febrero 2011, 10:57
Tras concluir la excavación arqueológica en el solar de la calle de La Rúa a la altura del número 49-51 y limpiar los restos del antiguo castro celtibérico, los arqueólogos están procediendo de nuevo a cubrir con arena el hallazgo de finales del siglo IV antes de Cristo, que podría formar parte de la Puerta del Sol de la antigua Muralla. El objetivo de enterrar de nuevo esta construcción de arenisca de Villamayor, encajada sin ningún tipo de argamasa y asentada sobre piedra silícea no es otro que evitar que la lluvia y el duro invierno que está viviendo Salamanca este año dañen los restos de una fortificación histórica que ha sobrevivido durante 25 siglos, según explica la arqueóloga Elvira Sánchez, de Adobe Gestión de Patrimonio Histórico, empresa que se ha encargado de acometer los trabajos. El área bajo la que se encuentran este tramo de la Cerca Vieja ha sido delimitado por unas balizas para que cualquier actuación en la superficie no la perjudique y para facilitar la ejecución de cualquier obra sin dañarla.Amplíe esta información en la edición impresa de LA GACETA del miércoles 2 de febrero.
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