Íñigo Onieva explota contra los periodistas al ser preguntados por su deseada paternidad

Tamara Falcó e Íñigo Onieva viven sus primeros meses como matrimonio y parece que ya comienzan a surgir fisuras y mal humor entre el esposo de la marquesa de Griñón.

Tras dos meses de vacaciones repletos de inolvidables momentos a los que la flamante pareja de recién casados ha puesto fin, regresando a Madrid para retomar sus compromisos profesionales.

Volcados en sus respectivas profesiones, Tamara e Íñigo no ocultan que están deseando convertirse en padres. Un sueño que parece que tendrá que esperar, ya que la hija de Isabel Preysler no puede quedarse embarazada hasta que pasen tres meses desde su viaje de novios, ya que las vacunas que se tuvo que poner para viajar a Sudáfrica con contraproducentes con sus planes de aumentar la familia.

Mientras Tamara no se ha dejado ver desde que puso fin a sus vacaciones, su marido ha reaparecido este miércoles ante las cámaras, aunque menos relajado de lo que esperábamos tras unas larguísimas vacaciones en las que ha recorrido junto a su amor destinos de ensueño al alcance de muy pocos bolsillos.

Serio, y sin ocultar su fastidio por la presencia de los reporteros en la puerta de su casa, Íñigo se ha limitado a afirmar que su mujer se encuentra «muy bien», dejando en el aire qué hay de cierto en que participará en 'El musical de tu vida' y huyendo cuando le hemos preguntado por sus planes de paternidad: «No lo sé, no tengo nada que decir así que, por favor, como siempre no me acompañéis». «No tengo nada que decir, voy a cruzar y no me acompañéis» ha zanjado tenso, evitando confirmar o desmentir que hay de cierto en que tienen que esperar hasta noviembre para aumentar la familia.

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