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Viernes, 3 de julio 2020, 19:32
Hemos mantenido a los salmantinos conectados, más conectados que nunca y cuando más lo necesitaban”. Esa es, según Marisa de Urquía, directora general de Telefónica en el Territorio Centro (Castilla y León, Castilla-La Mancha y Madrid), la principal contribución de la compañía durante la crisis de la COVID19. “La red de Telefónica ha permitido mantener viva la actividad empresarial, laboral y educativa y ser soporte de la respuesta sanitaria”, añade.
“La vida se trasladó del espacio físico al mundo virtual: de los comercios a la red, de los cines a la red, de las oficinas a la red, de las escuelas a la red. El teletrabajo se impuso en las actividades que lo permitían. Los alumnos restablecieron el vínculo con los docentes a través de la educación a distancia. La ficción discurrió en plataformas audiovisuales lo mismo que la música, la lectura y las demás fórmulas de ocio y entretenimiento. Y los familiares y amigos tuvieron como nuevo punto de encuentro las llamadas a través del teléfono fijo y las videoconferencias”. “Y todo ese cambio ha pasado por la red de Telefónica”, sentencia.
Para De Urquía, si se han podido gestionar con éxito estos incrementos “inéditos” de tráfico en la red de Telefónica es “porque hemos trabajado e invertido mucho durante muchos años”. “Tener unas infraestructuras como las de Telefónica, capaces de responder de forma óptima a una situación como ésta es algo que no se improvisa”, recuerda. Además, con la universalización de las tarifas planas, el mayor consumo no ha supuesto más gasto para los clientes.
España es el primer país de Europa y el tercero de la OCDE en cobertura de fibra. “Hay más fibra en las zonas rurales de Castilla y León y de Salamanca que en la media de las zonas urbanas de Europa”. En concreto, en Salamanca seis de cada diez habitantes disponen ya de la tecnología de Banda Ancha Fija más avanzada del mercado gracias a una inversión de Telefónica de 30 millones. “Y ese porcentaje crecerá de manera muy importante durante los próximos dos años”. Y la red móvil tampoco se queda atrás, con una cobertura 4G del 94% de la población”, afirma. “Tenemos la mejor red, ahora hay que dar el salto definitivo a la digitalización”.
Contribución a la sociedad
Pero se ha hecho mucho más, dice la máxima responsable de la compañía en el Territorio. “Nos apresuramos a suavizar el confinamiento de los salmantinos dando más datos y extendiendo la oferta de entretenimiento sin coste adicional. Hemos priorizado la atención a nuestros mayores en los canales telefónicos para asegurar sus comunicaciones. Realizamos de forma gratuita la conectividad de los hospitales de emergencia de la región -en Salamanca, el Hospital Santísima Trinidad y el Hotel Medicalizado Fonseca-, hemos donado material sanitario a hospitales y líneas de alta capacidad y tabletas a la Junta para su reparto entre enfermos y escolares con mayor riego de exclusión.
También hemos ofrecido a las Administraciones y empresas nuestra capacidad tecnológica e innovadora, apoyado a los negocios, aumentando sus datos sin mayor coste y siendo flexibles”, explica. Pero, para la directiva de Telefónica, “lo más importante es la contribución que Telefónica va a tener que realizar a partir de ahora y que será esencial para acelerar una transformación digital que garantice la recuperación económica”. “Telefónica va a tener un papel clave por la fortaleza de su red y ser el principal socio tecnológicos de las empresas y administraciones”, asegura.
“España en general y esta provincia en particular han acelerado en dos meses lo que quizá, en circunstancias normales, hubiese supuesto un lustro. Hemos ayudado a muchas empresas y Administraciones a teletrabajar en tiempo récord priorizando su seguridad, pero no podemos parar ahora”. Según De Urquía, la pandemia ha puesto de relieve la gran asignatura pendiente en términos de transformación digital. “Tenemos unas infraestructuras de comunicaciones excepcionales, pero ahora hay que dar el salto a la digitalización y para lograr esa digitalización, el uso y la formación en competencias digitales, donde estamos por debajo de la media europea, es esencial”.
Compromiso y esfuerzo
Marisa de Urquía quiere destacar que la crisis ha sacado lo mejor de Telefónica y de sus empleados. “Se ha puesto de relieve el compromiso y el esfuerzo de todas las personas que forman parte de Telefónica. Desde áreas tan estratégicas en este Territorio como Operaciones para mantener durante el confinamiento la conectividad y asegurar que la red soportaba sin problema alguno tráficos en la red fija y móvil sin precedentes en la región, priorizando además tráficos esenciales como los de las emergencias sanitarias, hasta el área comercial, trabajando a destajo para ofrecer a nuestras empresas y AAPP en tiempo récord soluciones de teletrabajo o de gestión en remoto con total garantía de seguridad”.
“Parecía impensable hacer las cosas que hemos hecho en Telefónica estando prácticamente el 95% de la plantilla en casa. Si nos lo hubieran dicho hace unos meses, no lo habríamos creído. Pero ha sucedido”, sentencia. “Y esta sensación de haber dado lo mejor es extensible al resto de la sociedad salmantina, a sus administraciones y, especialmente, a sus pequeñas y medianas empresas, con ejemplos asombrosos de adaptación a la nueva realidad y de innovación e ingenio”.
Finalmente, Marisa de Urquía, enumera algunos aprendizajes que nos está dejando esta crisis, entre ellos que las telecomunicaciones se han confirmado como un sector vital en las sociedades contemporáneas. “De hecho, la comunicación se evidencia, junto con la salud y la alimentación, como una de las tres grandes necesidades del ser humano. Y para ello hay que tener unas redes sólidas”. Otra lectura clave para la directiva es que la transformación digital “no puede esperar. Hay que seguir acelerando en la digitalización, porque es una cuestión de supervivencia para las empresas”. Esta emergencia también ha puesto de relieve, según sus palabras, “la necesidad de reforzar nuestra seguridad digital y de tener el control de nuestros datos. Hemos tenido que ayudar a muchas empresas y AAPP a subirse al carro del teletrabajo en tiempo récord y hacerlo garantizando plenamente la seguridad de sus comunicaciones”.
Aun así, para De Urquía el cambio o el aprendizaje más importante tiene que ver con la humildad, con el tomar conciencia de nuestra vulnerabilidad. “Durante estos meses de 2020 hemos comprendido cómo la vida de la humanidad puede verse interrumpida por un fenómeno fuera de control y cómo no es posible improvisar. “Telefónica lleva casi cien años preparándose para poder ayudar a la sociedad cuando lo necesita. Según Marisa de Urquía el objetivo más importante de Telefónica no es otro que “mejorar la vida de las personas con la tecnología”, concluye la responsable de Telefónica.
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