Con la presencia de Mario García Romo y Lorena Martín a partir del 2 de agosto, cuando llegará su debut en el Estadio de Francia, se rondará la treintena de deportistas salmantinos -o muy vinculados a la provincia- que hayan estado en unos Juegos Olímpicos. Fabián Vicente del Valle 'abrió el fuego' en Londres 1948 como abanderado y José Luis Albarrán, doce año después en el Olímpico de Roma, fue el primero en competir. Desde entonces, la única cita sin charros fue Tokio 1964, mientras que la que contó con una mayor presencia fue la de Sydney en el año 2000 con cinco deportistas. Los mejores resultados del deporte salmantino llegaron en la modalidad paralímpica, con las cuatro medallas de oro y una de bronce de Enrique Sánchez-Guijo en atletismo, y las dos de bronce de Alejandro Sánchez Palomero, una en natación y otra en triatlón. Medalla también consiguió, en este caso de plata, la selección española femenina de baloncesto en Río 2016, con una notable presencia del Perfumerías Avenida. El resto de mejores actuaciones fueron el séptimo puesto de Dori Ruano en puntuación en Sydney 2000, y el de la selección masculina de baloncesto en México 1968, con Vicente Ramos en sus filas.
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El deporte que más olímpicos -o paralímpicos- ha dado a Salamanca, con diferencia, es el atletismo. Con la presencia de Mario García Romo y Lorena Martínez serán ya 19 los representantes al máximo nivel, muy lejos de los 3 de ciclismo y los 2 de natación. Baloncesto, tiro olímpico, fútbol, tenis, rugby o triatlón han sido las otras especialidades.
Entre esa treintena de deportistas -el Mural de Olímpicos en el Julián Sánchez 'El Charro' tendrá que completarse próximamente- que han hecho que Salamanca fuera visible en los Juegos hay que contar también con Ángel Cruz y Rosa Colorado, que lograron la dificilísima clasificación, pero que después no pudieron competir, por lesión y enfermedad, respectivamente. También con deportistas, cómo no atletas, que no habían nacido en Salamanca pero que vivían y entrenaban para llegar a ese nivel aquí, como fueron Ángel Hernández, Frutos Feo y Cora Olivero.
Más 'apartados' quedan otros en cuyo DNI tampoco pone que sean charros pero que sí guardaban vinculación con la provincia por sus orígenes, como la laureada portera de waterpolo Laura Ester o la gimnasta Alba Petisco. Por contra, la judoka María Bernabéu sí nació en Salamanca, pero no guardó ninguna vinculación con la ciudad.
Reseña especial merece el Perfumerías Avenida, que en cinco de las seis ediciones en las que España ha disputado los Juegos en baloncesto femenino ha contado con una nutrida representación.
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