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Ramiro celebrando el gol del empate del último partido en Zubieta. Unionistas de Salamanca
Ramiro enseña las garras

Ramiro enseña las garras

El capitán del Unionistas: «El banquillo es algo a lo que no estoy acostumbrado, se acepta y se trabaja para cuando me llegue el turno»

Miércoles, 13 de septiembre 2023, 20:46

Ramiro Mayor (Zaragoza, 32 años) tenía olvidado la última vez que enlazó tres choques seguidos sentados de partida en el banquillo. Desde luego, para él y para todos, es algo más que inédito desde que desembarcara en el Reina Sofía en la campaña 2020/21, con la extinta Segunda B dando sus últimos coletazos. Nunca en sus cuatro temporadas en el club blanquinegro había estado tantos partidos sin jugar de inicio. Su suplencia, por tanto, como la de Héctor Nespral —el otro capitán, que asume con naturalidad su situación: «Tenemos una plantilla en la que todos están capacitados para salir de inicio», ha explicado por activa y por pasiva—, llaman mucho la atención. «Son mis ídolos», es respuesta acuñada por Dani Ponz cada vez que se les pregunta por ellos; por su decisión, en general. El caso es que por si quedaban dudas del papel que juegan dentro del vestuario y del terreno de juego —son capitanes y los dos únicos jugadores que saltan la barrera de los 30 años de edad—, el punto que se sacaron de la manga en Zubieta. Uno (Nespral), como asistente; el otro (Ramiro), como goleador inusual (llevaba sin hacer un tanto, el único hasta el domingo, desde octubre del 2022): «¿Ensayado?, ¿hablado por la situación? Es verdad que llevamos muchas horas de entrenamiento juntos, pero lo que pasó es que Héctor puso un balón buenísimo, pero buenísimo, y tuve la fortuna de que me cae a mí y soy capaz de rematarlo como tenía que ser para que acabara en gol», rememora con todo lujo de detalle. «No me voy a acordar, si hacía que no marcaba un gol desde el partido contra la SD Logroñés de hace dos temporadas en el Reina Sofía... Yo no estoy acostumbrado a marcar y el gol es lo más especial que tiene este deporte, para mí, por todo, ha sido una alegría», sentencia.

El tanto, y el punto sumado a renglón seguido —por ser la última jugada del partido en Zubieta—, son un golpe sobre la mesa de los esquemas de Ponz, en los que de momento entran, pero como refresco: «De momento es lo que toca, el míster hizo el cambio en ese minuto 60, pensando en que el equipo pudiera coger aire fereco y acabar cambiar el partido. Y, sinceramente, ese tramo fuimos bastante superiores. Llegamos al final perdiendo, aunque pudimos y debimos haber empatado antes, y llegó la jugada. Y el foco, parece, que se coloca sobre nosotros. Yo, desde luego, y hablo por mí, estoy encantando de poder ayudar siempre al equipo», explica.

A caballo entre el gol y el partidazo ante el Deportivo de La Coruña, rival ante el que ya no pudo jugar en el choque de vuelta de la pasada temporada y ante el que, hasta esa fecha, no se había perdido uno solo de los 450 minutos de Liga anteriores; a las puertas del partido que puede disparar en bolsa, otra temporada más a Unionistas en el Grupo 1 de la Primera Federación, ¿una vez más suplente? «La verdad que no estoy acostumbrado a ser suplente. Y no lo voy a ocultar, se acepta como no puede ser de otra forma. Con tranquilidad, trabajando, preparado para cuando me toque ayudar al equipo desde el inicio. Y cuando el míster me diga que salgo de la partida, pues igual, ayudará en lo que puedo controlar. La temporada es muy larga —coincide con las explicaciones dadas por Ponz tras el choque en Zubieta— y la base es trabajar», desgrana sin paños calientes, con las garras afiladas en mitad de un vestuario que va sobrado de juventud y que le exige. El empaque que ha desplegado a lo largo de los 6.930 minutos disputados como blanquinegro lo saca a relucir también a la hora de salir al corte de sus compañeros: «Es una evidencia que el equipo está haciendo buenos minutos de fútbol, y también que estamos sufriendo muy poco, hasta la fecha en tres partidos solo nos han hecho un gol; luego, es verdad que generamos ocasiones y no entran. Creo sinceramente que es un buen inicio contra buenos equipos, eso dice que la idea del míster va por el buen camino, y que como se ha podido ver hasta ahora lo que busca es tener más el balón en nuestro poder con respecto a lo que habíamos hecho con él la temporada pasada», concluye el defensor aragonés.

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