En el nombre del gol: Cristo Medina

La huella de Cristo Medina (Pueblonuevo, 36 años) es imborrable en Unionistas. Por muchas cosas. Por el ascenso a Segunda B, sin ir más lejos. Pero, sobre todo, por el gol. El 'ratón' extremeño sigue siendo, seis temporadas después de decir adiós al entonces conjunto de Las Pistas, el máximo goleador de la historia del club. Sus 41 tantos son palabras muy mayores; es que el siguiente de la lista, Isaac Manjón, tiene su registro anotador a 12 goles vista (29) de los que firmó en las dos campañas de Tercera División el ariete pacense.

Por eso, nadie como él para hablar del problema con el gol que sufre su equipo: «Cuando dije que siempre sería un unionista más no era mentira, sigo al equipo todo lo que puedo. Y sé la mala racha que ahora atraviesa. La esencial, por lo que puedo ver desde la distancia, es que el equipo está unido. Las rachas van y vienen, por eso es importante seguir el camino. No hay que desesperar porque llegará un momento en el que entren y esto se verá como lo que es, una racha», aborda la crisis.

Y pone ejemplos: «A todos los equipos nos pasa (ahora milita en el Don Benito de la Tercera extremeña) que con una ocasión nos llevamos los tres puntos y en otros partidos con seis remates claros acabamos perdiendo 2-0». «La receta que se tiene que aplicar el vestuario es la que siempre ha tenido el club: nunca rendirse, porque acaban saliendo las cosas. A este club en estos años le han salido tantas cosas bien por eso mismo», explica. Dicho esto, ahonda en el apartado mental: «Con el tiempo yo he descubierto que darle vueltas a las cosas que no salen no ayuda. Cuantas menos vueltas se den, mejor. Yo me tiraba tres partidos sin marcar, lo mandaba todo al carajo y al siguiente, marcaba. Lo importante, insisto, es crear ocasiones y tener la sangre fría en esos momentos delicados. El nerviosismo no ayuda a definir».

Y esto lo dice inmerso en un proceso similar, no con el gol, y sí con el fútbol. A sus 36 años ha vuelto a reengancharse en el Don Benito (el club que le robó el ascenso de campeones a Unionsitas en la campaña 2017/18) después de un parón de más de medio año por el pelotazo que sufrió en un ojo en un entrenamiento, y que le ha hecho perder parte de la visión: «Está bien, que es lo importante, tengo menos visión pero las revisiones dicen que todo marcha bien. Por eso y porque el Don Benito me permitió volver manteniendo mi trabajo en un súper he vuelto».

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