«Tenemos que mirarnos el ombligo cada uno de los jugadores de Unionistas y sacar el pecho fuera de casa»

El carril diestro de Unionistas esta temporada varía según el contrincante que hay enfrente, sin embargo, en las citas importantes Mikel Serrano se ha ganado un hueco en los esquemas de Dani Llácer, ganando así la partida a Aitor Pascual. Unas horas después de sufrir una nueva derrota en un compromiso lejos del barrio de La Vega, sexta en lo que va de temporada, el defensor zaragozano quiere pasar página dónde mejores resultados saca el equipo ante la Gimnástica Segoviana, aunque, no rehúye a la hora de hablar de 'culpables' en los partidos como visitantes.

Antes de hablar de futuro, toquemos la última salida, ¿qué explicación le da Mikel Serrano a una dinámica como la que vive actualmente Unionistas fuera de casa?

—Bueno no creo que haya explicación. Fuera de casa no se está dando como queremos. Personalmente, lo único que pienso es que solo queda remar y mirar hacia adelante. Solo miro a la Gimnástica Segoviana y no quiero mirar atrás, ni más adelante. Tanto el grupo como yo, pensamos en este fin de semana y en ganar a la Segoviana.

En las últimas semanas, reiteran el mismo mensaje: «Los culpables somos los jugadores».

—Sí, para mí el cuerpo técnico plantea los partidos de una forma muy buena. Luego nosotros no salimos y no hacemos lo que tenemos que hacer, no sé qué pasa. Es una situación que nos está costando, pero ya te digo que entrenando día a día y los compañeros como los veo y todo, tenemos capacidad para hacer mucho más y estoy seguro de que se dará y va a ser así.

Escuchándole, entiendo que son contrarios a las críticas constantes hacia el entrenador.

—Personalmente, me intento evadir un poco de las redes sociales y demás porque al final son mucha la gente que comenta, pero lo único que te puedo decir es que nosotros confiamos 100 % en Dani Llácer. El problema no es él, tenemos que mirarnos el ombligo cada uno y sacar el pecho fuera de casa.

Ahora, buscan repetir la película de toda la temporada con ese 'reset' que hacen cada vez que vuelven al Reina.

—En casa nos sentimos fuertes con nuestra afición y al final en casa estamos cómodos. Todo fuera no se está dando como queremos, pero lo que te digo, solo queda remar y pensar en este fin de semana. Si somos nosotros mismos, no tengo duda de que ganaremos.

Todo, además, arropado por el ambiente que se vive en el Reina Sofía.

—Es una locura. No he vivido nada parecido y no creo que lo viva. Igual de gente puede ser, pero tan familiar no y es una locura. Unionistas es diferente y le tengo ya mucho cariño. Lo que intentamos cada vez que volvemos a casa es devolverles la ilusión que se merecen, y en Zamora regalarles la victoria que tanto se merecen.

Y, ¿qué es lo que tiene la afición para que sea tan especial?

—Cuando estás jugando ya sientes ese runrún de que es tu gente, tu afición. Al final es un club que siempre nos está apoyando las buenas y las malas y eso se agradece. Parece que cuando nos meten algún gol, hemos metido nosotros de lo que animan, eso es una locura.

Al final, entramos en una recta final y ya no pueden fallar.

—Ya son todo finales. Ahora ya cada fin de semana es una guerra en la que tenemos que salir con todo, y no solo ganar sino reventarlo, y es así.

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