Héctor Nespral rompe récords

Si nada se tuerce, Héctor Fernández Fernández-Nespral (Oviedo, 30 años), que es capitán de Unionistas por motivos obvios, se convertirá en breve en el segundo jugador centenario de la historia del club, tras Carlos de la Nava.

Ante el Deportivo de La Coruña jugó su encuentro 96 en competiciones nacionales (99 en total, si se suman los choques de la fase regional de la Copa RFEF, que son 3), repartidos de la siguiente manera: 1 choque en la Copa Federación, 21 en Segunda B, 2 en la Copa del Rey y 76 en la Primera Federación; competición en la que tumbó el pasado sábado el primero de los récords que va a tumbar este curso. Nespral se convirtió en el primer jugador de la historia del club en superar los 5.000 minutos jugados en la nueva categoría de bronce. Y si no llega a ser porque Dani Ponz le sustituyó en el 70 y no en el 77, también se hubiera convertido en el tercer jugador con más minutos en la historia del club, superando a Salva de la Cruz (si este mismo sábado juega ante el filial de Osasuna, lo logrará). «Son datos y los datos son lo que son. Pero dentro de los números, la verdad es que están mucho trabajo detrás, profesionalidad, exigencia física... Esto me suena a un premio al trabajo bien hecho en el campo, la verdad», dice el jugador curioseando sus propios números como jugador de Unionistas. «Si tengo que hacer un balance de estos cinco mil minutos (lleva exactamente 5.031), solo puedo decir una cosa: es buenísimo. Hemos competimos contra equipazos año tras año. Por eso y porque, pese a que el club tiene poca historia, he formado parte de este crecimiento en todos los niveles; y eso me resulta más que interesante».

En todos sus minutos en Primera Federación —pero, evidentemente, no sólo—, si Nespral ha dejado clara una cosa es que es un jugador diferente. «Fútbol con cabeza», se ha llegado a definir el mismo en sus redes sociales. Y, por eso mismo, su momento más especial en todo este tiempo no es una acción o un partido en concreto, sino una llamada: «De verdad que lo ha sido. Guardo el día que Hernán me llamó como un momento importante de mi carrera. Lo hizo cuando estaba lesionado de gravedad y a mí esa confianza cuando no te conocen y sabiendo que ya llevaba siete meses parado es un momento personal inolvidable», desvela el mediocentro.

La cara 'B' de la 'era Nespral' en Unionistas sí que viene ligada a lo deportivo. En concreto, al último partido de Liga disputado en la extinta Segunda B. «Aquí nada ha sido difícil. Por eso, difícil, solo veo que haya sido, quizá, el partido contra el Valladolid B en los anexos de Zorrilla. Porque dependíamos de nosotros mismos para jugar una fase de ascenso a Segunda y no lo logramos». Y, precisamente, ese es uno de los retos pendientes que tiene Nespral: «Me encantaría quitarme esa espinita. Jugar un playoff a Segunda sería un premio para los que jugamos aquel partido y para la gente que lleva siguiendo al club tanto tiempo».

El récord le ha llegado en el partido que todos querían jugar, que además fue su primera titularidad de la temporada: «Es evidente que el míster en los tres partidos anteriores había elegido a otros compañeros antes que a mí, y tengo que decir que lo han hecho espectacular, con muchos merecimientos para jugar. A mí solo me queda entrenar. No busco ningún protagonismo, los que me conocen saben que me gusta trabajar en silencio y esperar mi momento. Creo, que más allá del centro al área que hace bueno Ramiro en San Sebastián, en lo que he jugado he tenido influencia en el juego, que es mi responsabilidad».

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