

Secciones
Destacamos
I. R. M. / J. G.
Salamanca
Jueves, 27 de junio 2024, 06:45
Jehu Chiapas ha vivido una temporada un tanto convulsa en el banquillo del Salamanca UDS. Su figura, discutida desde el primer día, ha pasado por diferentes caminos a lo largo del curso, sin embargo, el técnico repetía semana tras semana en rueda de prensa lo siguiente: «Yo estoy aquí solo para pensar en ascender». Ahora, unos meses después ese objetivo se ha hecho realidad y el Salamanca UDS es nuevo equipo de Segunda Federación tras firmar una intachable fase de ascenso, y una gran segunda vuelta del campeonato que, entre otras cosas, se ha traducido también en la primera presencia del club en la Copa del Rey.
Ya pasadas las horas de celebraciones, ¿uno tiene ahora mayor alegría del trabajo realizado?
—Alegría sobre todo por la afición. Las familias y todos los cercanos. Pero gran parte de eso también, a mí personalmente, me da tranquilidad, es poder estar en paz por lo que ocurrió el pasado año.
Habla de tranquilidad y alegría, ¿es por ello que ha estado tan comedido en las celebraciones?
—Para mí, es el momento de los jugadores. Ellos tienen el foco principal porque son los que lo han logrado, nosotros solo damos una ayudita. También lo sentía como jugador, y también me pone contento ver disfrutar a los jugadores.
Lo primero que hizo en rueda de prensa tras el ascenso fue mencionar a su familia. ¿Hasta qué punto han sufrido?
—Al final estamos nosotros aquí solos. Mi mujer, mis hijos y yo, entonces, pues toda la presión, todo el estrés, ella haciendo algunas cosas en el club, se da cuenta de todo lo que pasa y de la presión. Eso ha hecho también volvernos más cercanos. Más una familia que lucha por el sueño mío y por el sueño del Salamanca, eso me traslada tranquilidad.
Una parte importante son también sus hijos, ¿qué le dijeron tras el partido?
—A mi hijo sobre todo le encanta el fútbol y se pasa todo el día cantando cánticos de la afición y el himno, prefiere ver los partidos del Salamanca antes que los dibujos en la televisión. Para mí es una alegría.
¿Le ha llegado a exigir el ascenso a su padre en casa?
—Le encanta mucho el fútbol, y por muy pequeño que sea entiende muy bien la pasión y lo que es este club. No entiende todavía el tema de los ascensos y demás, pero por lo que me dice mi mujer mientras los otros niños juegan, él está ahí viendo los partidos y le encanta.
Hablando de la temporada, ¿se ha sentido en algún momento maltratado por la afición? Ha logrado el primer billete a la Copa y además un inmaculado playoff.
—Entiendo a la afición y han pasado muchas cosas. Al final se dan algunas situaciones que no ayudan a tener ciertos aspectos más claros, pero, también es cierto que muchas personas me han mostrado su cariño y al final el fútbol es así.
Ahora es la mejor parte de esta historia, sin embargo, en el parón de invierno se filtraba que debía estar en la calle.
—Si en su momento se hubiera tomado la decisión era normal, el fútbol son resultados y no espera a nadie. Empatamos muchos y esa derrota en Astorga fue dura, pero, ya en ese momento la entendimos como algo inexplicable o mala fortuna.
Ahora mismo, buena parte del grupo tiene contrato, ¿firmaría que buena parte del bloque continuase y tener menos calidad?
—Queremos que un buen número sigan porque creo que tienen la calidad para estar, y con otros hay que ser agradecidos porque han sacrificado mucho.
¿Le sorprendió la oferta de renovación en el mismo día del ascenso, es decir, las formas?
—Bueno, no es mi primer año, llevo seis años aquí y trabajo de una forma directa con Manuel, entonces sé cómo es él y cómo funcionan las cosas. Hemos vivido mucho años y sabemos cómo es su forma de ser.
¿Y Jehu, se ve como segundo entrenador?
—Sería extraño, complicado y raro para mí. Habrá que sentarse para hablarlo muy bien para ver si realmente vale la pena o qué es lo que se tiene que hacer para que las cosas funcionen. Al final no tenemos que olvidarnos que lo principal es tomar la mejor decisión para que el equipo funcione lo mejor posible. Y no solo soy yo, el cuerpo técnico lo conforma mucha gente y también son importantes.
De puertas para fuera se desconoce, pero, ¿es Jehu un técnico ultra metódico y de acostarse tarde viendo vídeos y analizando?
—Pues la verdad es que tengo rutinas muy marcadas y sé que regularmente de lunes a jueves eran días de dormir tarde, de hacer ediciones, de ver vídeos. Primero los nuestros, luego los del rival y más o menos tener todo lo mejor posible para los jugadores y para brindar esa información. Son muchas horas en solitario, es mucho tiempo invertido que afortunadamente ha sido correspondido con el resultado que quería.
Ya la última, con el pitido final te fuiste en solitario directo al vestuario. ¿Lloraste por lo logrado, te desahogaste?
—Lo primero fue ir con mi familia, y después es cierto que necesitaba estar solo. Lloré la verdad. Necesitaba tener ese momento de tranquilidad, de paz tras haber conseguido el objetivo. Ojalá así fuera cada año, pero al final el fútbol es caprichoso.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.