Derrota con polémica para el Guijuelo

Segunda derrota seguida para el Guijuelo, que se queda en la zona media de la tabla. Pero la derrota en el campo del líder llegó con polémica arbitral y con una sensacional imagen de los chacineros. Una gran primera mitad de los de Mario Sánchez se emborronada en los compases finales con una protestada expulsión de Coque tras un leve forcejeo, acción que como muchísimo era amarilla, y en la falta que propició esa roja injusta llegaba para colmo el único tanto de la matinal. En el segundo periodo el Ourense CF estuvo más cómodo y pudo ampliar, pero un corajudo once chacinero incluso tuvo sus opciones para empatar. Como dijo aquel día Juanma Lillo con la UDS, «jugando así hay permiso para perder».

El Guijuelo se plantó valiente en el campo del líder, con presión alta y sin encerrarse demasiado en su parcela. Garban avisaba con un peligroso centro a los diez minutos al que no pudo llegar Alberto, acabando el esférico en los guantes de Marqueta. Los chacineros incomodaban bien la salida de pelota del Ourense, con poco balón los de Rubén Domínguez en el tramo inicial de la matinal.

Clarísima la oportunidad salmantina a los trece minutos cuando tras un centro de Alberto algo forzado, con remate del ariete Juan Antonio que se acabó estrellando en el palo. Respondían los gallegos con una llegada de Andrada por la diestra con centro al área que empalmaba Alberto Gil, taponando la zaga verdiblanca saliendo el esférico a córner.

Ramos llevaba el timón del conjunto local pero el Ourense no estaba fino, muy bien bloqueado su juego por la seria defensa del Guijuelo. Toti probaba con un disparo raso y desviado para los visitantes, con Facu Ballardo dando el susto cuando en una entrada normal pareció sufrir un problema de tobillo, aunque pudo seguir.

Nervios entre los seguidores del Ourense, ya que el equipo de Rubén Domínguez no carburaba y el peligro era más de los salmantinos, como en un zapatazo de Toti a los 32 minutos desde unos 25 metros que se marchaba no lejos de la escuadra de Marqueta. El partido estaba muy igualado en Oira, con las defensas sellando las vías de acceso al peligro. Amín se aprovechaba de un resbalón de Toti pero el central zurdo Asiel se cruzaba para conjurar la oportunidad de los locales.

El encuentro sufrió un giro de 180 grados en dos minutos felices para el Ourense y nefastos para el Guijuelo al borde del descanso. Un enganchón en el banderín de córner entre el zaguero Coque y el local Facu Ballardo acabó con algún codo saliendo de zona, factor que el colegiado juzgó con roja directa para el lateral izquierdo de los visitantes.

Pese al aluvión de protestas de los jugadores del Guijuelo, los verdiblancos se quedaban con diez. Y en el servicio de la falta, el centro de Andrada lo controlaba en la frontal Álex Gil para soltar un trallazo al palo corto que superaba a Rabanillo.

El partido llegaba al descanso con ventaja del líder y los chacineros con diez, algo sorpresivo si tenemos en cuenta que hasta el minuto 44, a los puntos habían sido bastante mejor el equipo visitante.

Tras el descanso, doble cambio visitante y zaga de cinco, con Alberto y Cedenilla en los carriles. El Ourense estaba más cómodo con el marcador a favor y ante diez, y así una jugada personal de Amín la enviaba alta Alberto Gil. A los trece minutos, de nuevo brillaba Alberto con una jugada personal, cediendo atrás para el trallazo de Fidalgo que sacaba Rabanillo con una sensacional parada. Poco después era Andrada quien probaba desde la frontal deteniendo en dos tiempos el meta del Guijuelo.

Pero poco a poco se fueron estirando los de Mario Sánchez y así Ibra no llegaba por poco a un buen envío desde la diestra de Alberto. Morgade creaba peligro para los azules por la izquierda, pero el recién entrado Xabi la tuvo a los 69 minutos cuando robaba un balón y se iba solo hacia el marco de Marqueta. El central Prado salvaba cruzándose con eficiencia cuando se cantaba el empate.

Regresaba Montes, una buena noticia, y de nuevo Xabi Domínguez la tenía a los 83 minutos en un tiro raso y cruzado que no pudo empujar por poco Ibra.

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