Alonso Fernández: «Me gustaría quedar no sólo por encima del Salamanca, sino de todos»

Hace ahora justo un año para Alonso Fernández (técnico de la UD Santa Marta) era impensable ser el entrenador de moda en Tercera; más que nada porque no sabía ni siquiera que iba a entrenar en esta categoría. Es algo que supo el pasado 5 de enero: «Alonso se ha merecido dar este salto al primer equipo siguiendo esa idiosincrasia de formación, la que nos distingue como una de las mejores canteras de la región», decía el club en su puesta de largo. A punto de cumplir 365 días como técnico del primer equipo del San Casto, Alonso tiene al Santa Marta no ya en fuera de los puestos de descenso en los que recogió al equipo (tenía solo 10 puntos) sino que está en los de playoff a la 2ª Federación, con 25. Qué barbaridad.

Ahora ya en frío y en medio del parón, ¿qué cuerpo tiene un entrenador de playoff a Segunda RFEF?

—El del trabajo bien hecho. Teníamos una obligación marcada que era la de no estar en continuo sufrimiento como el año pasado. Para ello preparamos una pretemporada de 42 días con los objetivos clarísimos, tenía que ser muy dura y de la que esperábamos recoger buenos frutos. No pensábamos que serían estos. Y como no lo pensábamos (estar en 'playoff') no deja de ser anecdótico.

El próximo 5 de enero cumple un año al frente del banquillo, ¿qué nota se pone?

—Mi nota es que estoy muy contento, siempre lo he dicho: ser el entrenador del equipo de tu pueblo es lo más. Ya lo era en la cantera y ahora más. Luego es verdad que cuando cojo el equipo la temporada pasada teníamos 10 puntos y estábamos en descenso y ahora, un año después, la situación es radicalmente opuesta. La nota que nos podemos dar es la de la planificación, que se ha demostrado buena. Tener opción de pensar qué hacer y cómo, aunque sea un aspecto muy sencillo, nos ha llevado a estar ahora así.

A todo esto hay que sumar la manera en la que gana su equipo, el fútbol que despliega. Todo el mundo habla maravillas de ustedes.

—Es a donde nos ha llevado planificar bien. El objetivo era salvarnos y, a partir de ahí viene todo lo demás. El juego no creo que haya cambiado muchísimo con respecto al año pasado, pero sí que es cierto que los resultados te dan confianza. Las dos cosas juntas te invitan a soñar y es algo bonito, la verdad. Lo que nos ha pasado estas 14 jornadas no son casualidad, creo que la suerte se encuentra con el trabajo.

Su equipo es el 5º que más goles mete (20), pero hay un dato que me llama más la atención: son el 7º menos goleado con una defensa casi juvenil. ¿Cómo se hace?

—Es verdad que somos muy jóvenes en defensa. Tenemos a Sergio en portería que lo es, Rivas lleva dos años y es el primer año con ficha sénior, Villardón y Tena son jovencísimos y Quijano es juvenil. Es un tema de trabajo, de que lo que preparamos lo asimilamos muy bien y tenemos esa ambición.

También suman ese poso de los Mito, que es el pichichi de la Tercera, o Chopi.

—Son gente que tienen experiencia, que saben de qué va la categoría y que encima están a un nivel muy bueno. Luego hay nombres que no lucen tanto como Cascón que te aportan muchísimo, que te hacen ese trabajo sucio que es clave y nosotros los valoramos como deben.

Todos los nombres están en el escaparate. ¿Teme que otros clubes llamen a sus puertas?

—No es algo que me pare a pensarlo mucho. Yo confío en ellos y ellos en nosotros. Todos han tenido la oportunidad de salir en verano y se quedaron, no me preocupa que les llamen a la puerta. Es más, sería reconocer que lo están haciendo muy bien. El Santa Marta llevaba sin tener jugadores en la selección de Castilla y León desde hacía muchos años y este han estado cuatro.

La última, están por encima del Salamanca en la tabla. ¿Qué se le pasa por la cabeza?

—Es lo mismo que lo nuestro, anecdótico. El Salamanca está en una dinámica que no es del todo buena por su contexto, su plantilla, su presupuesto... La Tercera es un bucle. Evidentemente tirarán hacia arriba; pero no es algo que a mí me tenga que preocupar. Si me dices que si me gustaría acabar por encima de ellos, pues claro. Pero no por ser el Salamanca, querría acabar por encima de todos porque jugamos para ganar. Sería un premio excelente al trabajazo de la plantilla.

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