Avenida no encuentra una buena versión y cae derrotado frente a un Valencia Basket muy superior (48-67)

No pudo ser. El Perfumerías Avenida cayó derrotado con claridad por 48-67 frente a un Valencia Basket que fue mejor y muy superior en el aspecto físico en Würzburg, y que tendrá la oportunidad de volver a hacerse con el título de Liga este domingo en la Fonteta. Desde el inicio las visitantes estuvieron por encima y las de Nacho Martínez no pudieron encontrar su juego habitual, bloqueadas frente a la excelente defensa 'taronja', y con sus jugadoras más importantes prácticamente desaparecidas. Ni siquiera se podrá poner de excusa la labor arbitral, comandada por una Paula Lema que no está nada afortunada, por decirlo suavemente, cuando tiene que pitar a Avenida. Ni tampoco sirvió empezar la final en casa, a pesar de que los más de 3.000 aficionados volvieron a poner todo de su parte para intentar llevar en volandas a las suyas.

No salió nada cómodo Avenida a la pista y rápidamente se vio con un 0-7 en contra que no era la mejor señal. Hasta pasados tres minutos no llegó la primera canasta, un triple de Carter, aunque no fue suficiente debido al tremendo acierto del Valencia Basket, que metió 4 de sus 7 triples en el primer cuarto para ponerse con una ventaja de 11 puntos, mientras que las salmantinas firmaron un pobre 3 de 16 en los tiros de campo.

Al menos la diferencia a favor de las visitantes no fue a más y la entrada de Prince y Hatar dio fuerzas a las de Nacho Martínez, que se colocaron por primera vez a 2 puntos tras un triple de Leo Rodríguez, el tercero casi consecutivo de las salmantinas. Era otro Avenida –empujado por un Würzburg nuevamente espectacular-, pero desperdició un par de ocasiones para haber igualado el marcador y después ni Iagupova ni Hempe perdonaron para volver a despegar al Valencia Basket, mientras que otro problema para Avenida era la tercera falta de Carter, aunque la norteamericana no estaba nada acertada. Con 7 abajo (28-35) llegó el descanso después de que ninguno de los tres árbitros quisiera ver la personal sobre Vilaró en el último segundo en su intento por lanzar a canasta desde el centro de la cancha.

A la vuelta de vestuarios lo intentó en varias ocasiones Avenida, pero cada vez que tenía la oportunidad de acercarse a menos de 4-5 puntos aparecía la calidad de las jugadoras valencianas, ya fuera Iagupova, Romero o Ginzo, para volver a despegar a su equipo y castigar el ánimo tanto del equipo como de los aficionados salmantinos. Se notaba en los ataques, en los que cada vez costaba más encontrar algún hueco en la cerrada defensa visitante, y, por si fuera poco, tampoco ayudaban algunas decisiones arbitrales que desquiciaban a los seguidores y hasta a alguien tan calmado como Nacho Martínez. Al final del tercer cuarto Avenida perdía por 9 puntos y le tocaba volver a remontar, como en las dos eliminatorias previas, pero esta vez en solo diez minutos.

Pese a todo, la grada de Würzburg intentaba levantar la moral de su equipo con el 'sí se puede', a pesar de que en la pista las sensaciones eran otras. La primera canasta del último periodo era para las visitantes, que volvían a colocarse 11 arriba a 6 minutos del final, y después Ouviña ponía el 43-56 frente a un Avenida que parecía empezar a bajar los brazos. Cruzado el ecuador, Avenida no había logrado anotar, mientras que el Valencia Basket había sumado 9 puntos para marcharse hasta unos 18 que ya eran totalmente inalcanzables y que obligaban a pensar ya en el segundo partido. De hecho, los primeros puntos charros, tras un parcial de 0-15, no llegaron hasta el minuto 37 gracias a un triple de Lucía Rodríguez.

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