La Gaceta
Martes, 24 de septiembre 2024, 10:22
Una gran panorámica y mejor compañía. Son dos de los deseos más simples para los que buscan un poco de tranquilidad. Observar el atardecer con una buena comida y una conversación profunda, son planes a los que nadie dice que no.
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Para llegar a esa ansiada tranquilidad, muchos son los espacios que ofrecen ese momento y, en Castilla y León, los hay, y espectaculares. Si por algo está de moda Alba de los Cardaños -perteneciente a Velilla-, en Palencia, es por ser uno de los lugares más espectaculares para contemplar el atardecer. La pequeña aldea de apenas 24 habitantes, según el INE, se encuentra en la ribera del embalse de Camporredondo, lo cual aporta una mayor magia al enclave.
Añadido a esto, una vez se pasea por este territorio, los turistas se pueden encontrar dos parroquias y una ermita, lo que constituye una de las grandes curiosidades al comprobar los escasos habitantes que están empadronados. No obstante, por su componente natural, hay numerosas rutas de las que disfrutar para pasar una jornada de senderismo.
Asimismo, cuenta con un mirador con vistas a su espectacular embalse, lo que proporciona una experiencia única para los visitantes.
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