Un millón de kilos de patatas para alimentar al ganado por culpa de la huelga

La huelga de transportistas sigue causando perjuicios a ganaderos, con las dificultades de abastecimiento de pienso por la escasez de materias primas y el parón que se ha producido en la venta de ganado, pero también a los agricultores.

Se necesita más abono y apenas llega, aunque afortunadamente los almacenistas tenían reservas para el regadío; llegan a cuentagotas las semillas de patatas con la fortuna de que proceden de otros países y sí están entrando en España; y hay dificultades para vender la mercancía.

Uno de los colectivos más perjudicados es la sociedad cooperativa Floyma, con sede en Encinas de Abajo y especializada en la producción de patata para industria. Como consecuencia de la huelga de transportistas tuvo que cancelar el envío de patatas previsto la semana pasada con destino a la fábrica Matutano y eso ha hecho que las patatas hayan perdido el punto idóneo para la fritura y tengan que ir destinadas a la alimentación de ganado.

Son un millón de kilos de patatas los que perderá la cooperativa. Como consecuencia de la huelga, Matutano también se vio obligada a cerrar, pero incluso también la fábrica que tiene en Portugal, destino habitual de estas patatas de Salamanca, y a la que no le llegaba mercancía por las protestas de los transportistas españoles.

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