

Secciones
Destacamos
La dehesa salmantina se encuentra en peligro, y es que el cerambyx cerdo, un coleóptero también conocido como “capricornio de las encinas”, conquista poco a poco los troncos de los árboles que componen esta estampa tan querida y admirada. Tanto zonas mixtas como las habitadas exclusivamente por robles están a merced de este escarabajo, que siente preferencia por las maderas blandas, por lo que es esta última la especie más afectada.
La falta de soluciones y de depredadores que controlen a este insecto autóctono están acarreando la muerte prematura de la encina, la cual perforan, un árbol muy apreciado por su robustez y silueta, y que es además todo un símbolo de la provincia salmantina.
“La situación es dramática”, señala Juanjo Lemus, mirobrigense que estos días estrena un documental acerca de este problema, con la intención de despertar conciencias y animar a las instituciones a actuar antes de que sea tarde. Ante la situación, propone distintas alternativas. Zonas como Sancti Spiritus, Espeja y Ciudad Rodrigo figuran en so documental.
Se calcula que más de 6.000 hectáreas de encinas están afectadas en zona de Tamames, Vitigudino y Miróbriga. El cerambyx prolifera especialmente en árboles viejos, que debido a su ataque van muriendo, por lo que repoblar en mayor medida las encinas y otros árboles afectados equilibraría la balanza. “El monte es viejo, por lo que la situación se ha ido agravando”, asegura el autor del documental “Dehesa: supervivencia. La Amenaza del Cerambyx”. Existe, insiste, un desajuste debido a la sobreexplotación. El saber popular queda plasmado en esta obra reivindicativa, que espera servir de motor.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Sigues a CASAMAR. Gestiona tus autores en Mis intereses.
Contenido guardado. Encuéntralo en tu área personal.
Reporta un error en esta noticia
Necesitas ser suscriptor para poder votar.