«Hay tantos cambios que se pueden producir con el cereal...»

Marcos Martínez, presidente de la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas (ACCOE) analiza el efecto que los aranceles anunciados por el presidente norteamericano, Donald Trump, pueden tener sobre el cereal.

¿Cómo ve la situación del cereal?

—Estamos en una situación de incertidumbre. Eso es un poco la situación que tenemos desde principios de año.

¿En qué medida pueden influir los aranceles en los precios que hay?

—Lo que había ocurrido hasta ahora es que anunciaron unos aranceles importantes a Canadá y a México, luego esos aranceles no se implantaron. Se han anunciado nuevos, ¿La UE va a contestar con otros aranceles a productos agrícolas americanos? Pues es un interrogante. Pero si se implementa un arancel, por ejemplo, de un 20 por ciento al maíz americano y EEUU y su maíz es un proveedor importante para España en cuanto a volumen, entonces cualquier restricción que se pueda producir en el tráfico mundial de materias primas, pues afecta. Son muchas más piezas del puzzle a encajar y los flujos de mercancía cambian. Ese es el interrogante.

¿Se compra o se espera?

—A ver qué ocurre. Si se cumple esa situación y hay tantas variables encima de la mesa, hay tantos cambios que se pueden producir en el cereal…

¿Qué efecto cree que tendría en el cereal si acabara la guerra de Ucrania?

—¿Qué ocurre? ¿La UE va a quitar las sanciones a Rusia o no? Si acaba la guerra, igual se acaban las sanciones y pueden entrar productos rusos sin ningún tipo de restricción a la Unión Europea y se eliminan las sanciones. Con Ucrania, volveríamos a un estatu quo con el que la mercancía ucraniana tuviera cupos para entrar en la UE. En definitiva, hay que ser tremendamente prudente. En el caso de agricultores volvemos a lo de siempre , hay que comercializar la cosecha en 3 ó 4 veces a lo largo de la campaña agrícola para precisamente protegerse de esa volatilidad y geopolítica a nivel mundial, que nadie controla. Muchas veces nada tiene que ver oferta y demanda, previsiones de cosecha, consumos… tiene que ver mucho más cómo se configura el precio con lo que es la geopolítica. La paridad euro-dólar es otra variable importante. Hay que ser tremendamente prudentes.

¿A qué cereal afectaría más los aranceles de Trump? ¿Al maíz?

—Sí, sobre todo al maíz. Estamos hablando de que estamos en estos momentos por encima del millón de toneladas de maíz americano que ha entrado en la campaña agrícola 24-25. Esto evidentemente afecta.

¿Habría maíz suficiente en España si deja de entrar el americano?

—No. Tendremos que buscar otros flujos. Ojo, que esto no significa que si no viene maíz americano, los precios vayan a subir. Significa que el maíz tendrá que venir a España de otras zonas o países de los que ahora no esté viniendo o que está viniendo pero que tendrá que venir en mas cantidad. Estoy pensando en Francia, Rumanía, Ucrania… cambiaría la situación de dónde traer el maíz porque España es deficitaria en tonelajes importantes. Necesitamos importaciones en volumen mucho más alto de lo que producimos para abastecer nuestra cabaña ganadera, a nuestras fábricas de pienso.

Si de esos países entra más caro, ¿no tendría tampoco efecto en el precio del nacional?

—Hay que tener en cuenta que ese maíz americano iría a otras zonas del mundo , y esas zonas del mundo que reciben maíz americano no recibirían de otras. Cambiaría. En principio, no importamos cebada y trigo americano.

En cuanto a stock de la pasada campaña, ¿hay mucho guardado de almacenistas y agricultores?

—Creo que la comercialización se ha hecho bastante de manera escalonada. Para estar a finales de febrero tenemos stock suficiente -tanto lo que queda de nacional, como le que viene de importación- para hacer un enlace sin ningún problema.

Los agricultores se quejan mucho del alto coste y del bajo precio, ¿ahí qué se puede hacer?

—Los fertilizantes en otoño tenían un precio muy similar a los que tuvieron en otoño de 2023 o algo más bajo. A partir de enero han empezado a subir los fertilizantes nitrogenado. Han subido, calculamos, entre un 10-15 % a partir de enero. Si lo llevamos a hectárea de secano de Castilla y León, el coste de diciembre a ahora ha subido en unos 30 euros la hectárea.

¿Saldrán las cuentas después?

—Lo veremos en verano a ver qué precios tiene el cereal. Sí es cierto que se necesitan producciones por encima de las 3 toneladas para que el agricultor tenga una rentabilidad.

¿La Ley de la Cadena puede solucionar algo?

—Difícil. Estamos hablamos de oferta y demanda, a nivel local, regional, nacional, mundial… la pregunta es, bien, si se cumple la ley de cadena alimentaria y al agricultor se le garantizan sus costes de producción, ¿quién le va a comprar la cosecha? ¿Compras a 300 y vendes a 200 euros? Si no hay un margen comercial, nadie le va a comprar cosecha del agricultor garantizando los costes de producción, salvo que administraciones subvencionen esta situación.

¿Cómo viene la cosecha?

—A día de hoy, bien, a lo mejor con exceso de pluviometría en algunas zonas. En la cosecha es clave lo que ocurre desde el aporte de nitrógeno hasta la cosecha.

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