Sin 'Lenteja de La Armuña' en un momento de gran consumo

La mala cosecha ha hecho que se vaciaran rápidamente los establecimientos de «lentejas de La Armuña» y que a final de año, época de alto consumo, sea muy difícil encontrar este producto. Establecimientos sustituyen «Lenteja de La Armuña» o sin estar acogida a la Indicación Geográfica Protegida pero de Salamanca por otra procedente de otras provincias, principalmente de León o de Castilla-La Mancha. Y a las dificultades que tiene el consumidor se suman las que ha tenido el agricultor para encontrar semilla porque a muchos con su propia cosecha apenas les llegaba para repetir la superficie sembrada.

El presidente de la Indicación Geográfica Protegida «Lenteja de La Armuña», Juan Francisco Recio, ya había advertido el pasado julio que la campaña había sido «un auténtico desastre». «Solo recuerdo 1992 como un año peor para las lentejas: no se ha sacado ni para semilla», señaló. Ese año los agricultores trajeron semilla de otras zonas y sanitariamente hubo complicaciones.

Esta cosecha las medias de lentejas estuvieron en unos 350 kilos por hectárea (muy lejos de lo habitual en campaña, que está próximo a los 900) y la causa estuvo sobre todo en que se vieron perjudicadas por las lluvias; luego por el exceso de humedad que supuso enfermedades producidas por hongos; y, para terminar, en zonas hubo incluso el pedrisco. En cuanto al precio, no cotizan en la Lonja de Salamanca. Se sembraron unas 900 hectáras.

Para potenciar su producción, la Indicación Geográfica pide un cambio en la nueva PAC para que la ayuda sea mayor si la lenteja está amparada, como ocurría antes.

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