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La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León autorizó ayer la flexibilización de movimientos de ganado hasta que lleguen nuevas dosis de vacuna contra la enfermedad de la lengua azul.
En concreto, permitirá dentro de Castilla y León los movimientos de reses sin necesidad de vacunar ni de hacer PCR si es con desinsectación previa del animal y del transporte en el caso de que el destino del animal sea vida. En el caso de que salga de la explotación para su sacrificio, se permitirá con desinsectación previa del transporte. En el caso de que los movimientos sean fuera de Castilla y León, será necesario que los animales estén vacunados o que la comunidad autónoma de destino autorice la recepción del ganado.
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural señaló ayer que el problema de falta de dosis se debe a problemas de suministro de los laboratorios, por lo que depende de su fabricación, y confía en disponer de ellas (5,7 millones) en el plazo aproximado de 15 días.
Durante la mañana de ayer, colectivos ganaderos de Salamanca contactaron con la Consejería para mostrar su preocupación por la suspensión de vacunaciones y revacunaciones debido a la falta de las dosis. Después agradecieron la moratoria que habían pedido a través de comunicados de prensa la «19 de abril» y Ganaderos Unidos. Así, este último colectivo destacó, tras ponerse en contacto con la Consejería, que los laboratorios «no están cumpliendo objetivos». Resaltó, además, que a las dosis previstas se unen también otras «de urgencia» al declararse focos en Segovia.
Por su parte, la «19 de abril» resaltó que hace ya tres semanas que este colectivo había denunciado la falta de dosis, pidió medidas excepcionales y que fue ayer cuando la Dirección General de Producción Agrícola y Ganadera reconoció «problemas» e informó que el laboratorio suministrador no podrá facilitar «la suficiente cantidad de vacuna para atender la totalidad de la demanda en las zonas de restricción de Castilla y León durante las próximas semanas por un problema logístico».
La «19 de abril» lamentó en un comunicado que lo que entonces -tres semanas antes- calificó la Consejería como «problema sin importancia», no haya dejado de aumentar hasta el punto de suspenderse vacunaciones y revacunaciones «con los consiguientes problemas para las explotaciones».
También se manifestó ayer ASAJA Salamanca, que lamentó «que tengamos que llegar a este extremo por no tener vacuna suficiente». «Nos habíamos quejado de la falta de vacunas y nos habían confirmado entonces que había, que no habría problemas», denunció Juan Luis Delgado, presidente de esta organización agraria.
La demanda de dosis del serotipo 4 -la obligatoria en Salamanca- es alta porque a la que requieren las zonas suspendidas se unió a partir del 29 de abril la de las nuevas incluidas en vacunación voluntaria (Aragón, Cataluña, Navarra, País Vasco y también la comarca de Zamora).
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