El embalse de Almendra gana 31 hectómetros en sólo dos días y preocupa el azud de Riolobos

Las últimas precipitaciones y la apertura de compuertas del embalse de Santa Teresa han contribuido a que el embalse de Almendra, destinado principalmente a la generación de energía hidroeléctrica, haya ganado 31 hectómetros cúbicos en los dos últimos días, con datos hasta las cinco de la tarde de este jueves. En ese momento almacenaba 1.830,87 hectómetros cúbicos de los 2.649 de capacidad y hace un año almacenaba 1.609; también está por encima de la media de los últimos 10 años en esta fecha (1.486).

No obstante y a pesar de este dato, ahora mismo no es el embalse con más agua almacenada de España sino que ese lugar lo ocupa el de Alcántara, en Cáceres, que con las últimas precipitaciones almacenaba en la tarde de ayer 2.154 hectómetros cúbicos de agua y, aún así, está lejos de su capacidad (3.160). En el caso de Almendra, en abril de 2024 estuvo en su máximo, con 2.525 hectómetros cúbicos por la aportación del Tormes, regulado por el embalse de Santa Teresa, y por el caudal en el Duero aguas arriba de la presa de Aldeadávila.

Tanto ayer como el jueves siguió el desembalse de agua en Santa Teresa, de algo más de 6 hectómetros cúbicos hasta las cinco de la tarde. En ese momento el embalse contenía 398,84 hectómetros cúbicos, en las cifras marcadas para este periodo por la Confederación Hidrográfica del Duero, que en principio tenía previsto que al menos hasta febrero no dejaría almacenar por encima de los 400 hectómetros cúbicos por seguridad. El embalse, con 496 hectómetros, supera en agua almacenada a la media de los últimos 10 años en esta semana (342) y, está por debajo del agua almacenada hace un año (422 hectómetros cúbicos).

Lo que lamentan los regantes es que el agua del embalse de Santa Teresa no haya podido aprovecharse para llenar el azud de Riolobos, que se utilizará para el riego de La Armuña por las obras en el canal de Villoria. A mediados de octubre de 2023 la Confederación Hidrográfica anunció el inicio de los trabajos de mantenimiento y conservación del canal Villoria-La Armuña, con una inversión total de 5,6 millones de euros, dentro del Programa de Mantenimiento y Conservación de los Canales del Estado impulsado por la Dirección General del Agua. Los regantes han notificado a la Confederación Hidrográfica del Duero la necesidad que tienen de agua para el nacimiento de la remolacha, que se sembrará a final de mes. En principio, confían en tener disponibilidad de agua, aunque creen que el azud de Riolobos no se llenará hasta el 1 de abril.

En cuanto a las últimas precipitaciones, hay satisfacción en general por las lluvias y por la sanidad en los cultivos, con raíces fuertes en cereal también por las bajas temperaturas de los últimos días. Sí retrasa el fin de la campaña de remolacha.

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