El viaje de 12 días de ovejas salmantinas de la raza assaf rumbo a Irán

Cada vez son más los ganaderos de Salamanca que dependen de otros países para vender sus ovejas. La mayoría de ellos encuentra en el barco que transporta corderos -también vacuno, añojos- a países árabes, su solución, aunque como ahora las autorizaciones de carga van algo más lentas de lo habitual no salen con la frecuencia de hace un año. Esos corderos son sacrificados en sus lugares de origen.

Otros ganaderos, en cambio, han encontrado su salida en la venta de ovejas de su explotación con destino a otras de fuera de España, que necesitan introducir un tipo de ganadería concreto. Es el caso de Francisco Javier Pintado, ganadero de Hinojosa de Duero, que sabe por experiencia de la rentabilidad de venta de ovejas Irán, un país que apoya su economía en el petróleo y a cuyos ganaderos “no les importa pagar más por tener la mejor leche”.

Con ese destino, Irán, acaban de salir 80 ovejas de la explotación que tiene Pintado. Es su segundo envío a ese país, aunque a otra explotación -la otra vez fueron 110- pero a diferencia de entonces el viaje lo harán los animales todo por carretera. Si antes iban de Hinojosa a Bélgica en camión y allí embarcaban en un avión rumbo a Teherán, ahora las ovejas harán 12 días de viaje y pasarán por Francia, Alemania, Polonia y Rusia hasta llegar a Irán. Harán dos paradas de 24 horas y el resto lo fían a un camión para 300 ovejas -van también de otras explotaciones- con ventilación y bebederos. Las ovejas comerán en cada parada. Este es el séptimo viaje de ovejas assaf de España a esa explotación. “Está comprobado que llegan bien”, dice Pintado.

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