Girasoles en La Armuña. L.G.

Dominio amarillo en el campo: el cultivo que alivia a los agricultores salmantinos

Sembradas 27.814 hectáreas de girasoles en Salamanca: nunca hubo tantas al menos desde 2007 | Además las lluvias de mayo favorecieron que apunte a una alta producción

Susana Magdaleno

Salamanca

Martes, 18 de julio 2023, 16:26

El girasol se ha convertido en la gran sorpresa en Salamanca, con más hectáreas sembradas en la provincia, al menos desde 2007. Hay, según datos de la Junta de Castilla y León, 27.814 hectáreas en la provincia salmantina, de ellas, alrededor de 3.000 de regadío. La pasada campaña en Salamanca, también según datos del Gobierno regional, fueron 24.458 y en la anterior, la 2020-21, el número de hectáreas de girasol no llegó a 16.000 (15.782).

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¿Cuándo fue la última cosecha a la altura de este año?

Desde el año 2007 hasta ese 2020 el máximo de hectáreas cultivadas de girasol en Salamanca fueron las 16.499 de 2019. El aumento de la superficie contrasta con lo que ocurre en Castilla y León, donde ha bajado este cultivo y así ha pasado de las 387.019 hectáreas de 2021-2022 a las 365.896 de la 2022-23.

¿Qué diferencia hay entre unos campos de girasol y otros?

Ahora mismo en Salamanca son un espectáculo el amarillo de los campos de girasol aunque existe más diferencia que ningún año entre unos campos y otros por la diferencia de siembra. Unos, antes de las lluvias de mayo, y se vieron favorecidos en su crecimiento por esas precipitaciones, y otros, inmediatamente después, por lo que se ve muy diferente el desarrollo. El denominador común es la alta producción que se espera este año tanto en secano como en regadío por esas lluvias. En cuanto a comarcas, baja algo en Alba de Tormes, se mantiene en La Fuente de San Esteban, y crece en Ledesma, Peñaranda y Salamanca, las principales productoras.

La supresión de la ayuda a este cultivo hacía presagiar un año pobre en girasol pero al final la posibilidad de cultivar sin verse perjudicados por topes y la dificultad de siembra de otros cultivos, hicieron que los agricultores volvieran a mirar al girasol, ahora con el ecoesquema de rotaciones y especies mejorantes.

La incógnita, como señala el experto Roberto Tapia, es el precio en un año de altos costes de producción. Aún no ha comenzado la cosecha en Andalucía, lo que ocurrirá a mediados de agosto y, aunque hay más producción en Salamanca, también baja en el conjunto de España: 778.000 hectáreas en el avance de 2023, por las 879.800 de 2022.

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