Francisco Martín
Salamanca
Sábado, 8 de marzo 2025, 18:14
Criada entre vacas mansas y bravas, caballos, yeguas y el canto de la naturaleza, una pasión que se ha convertido en el motor vital de Rosana Galán, licenciada en Veterinaria y especializada en caballos de rejoneo, toro de lidia y vacuno. Además de, ser profesora de universidad y mamá desde hace 19 meses de la pequeña Laura del Pilar. «Soy una loca amante de los animales y del campo», asegura. A sus 39 años, reside en una finca en el término de Valdelosa tras dejar la ciudad para dedicarse plenamente a su trabajo de veterinaria.
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«Mi abuelo Emilio me enseñó a amar a los animales y a comprender el arduo trabajo que implica la vida en el campo, una labor que no entiende ni de horas ni de fiesta», continua. «Aunque este asociado a un trabajo masculino, cada vez se ven más propietarias de animales y fincas», afirma.
A lo largo de su carrera profesional, «nunca me he sentido menospreciada. Es más, todo lo contrario, la gente me ha respetado y respaldado, dándome más méritos que si lo hiciera un hombre», apunta. Además, añade que los animales «no entienden de hombres y mujeres cuando están enfermos, cada uno debe mostrar sus habilidades y tener capacidad de resolución». En cuanto al término igualdad, piensa que lo importante es «compartir y solucionar los imprevistos que surgen en el día a día, sin depender del sexo. Somos todos iguales y, bajo mi punto de vista, nos discriminamos a nosotros mismas».
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