Jueves, 21 de noviembre 2019, 18:44
Los que no tienen la suerte de que su coche duerma en un garaje, temen la llegada del invierno. Las heladas nocturnas castigan el motor del vehículo, pero también provocan otro problema más palpable y molesto. Hablamos de las lunas totalmente congeladas. Un fastidio cuando cada mañana queremos coger el coche y poner rumbo al trabajo. Toda poner la calefacción al máximo y usar la rasqueta o la funda de un CD.
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Al margen de retirar el hielo y resignarse existen algunos métodos caseros muy efectivos que pueden ayudarnos a paliar los efectos del hielo en las lunas del vehículo.
El primero de estos consejos es cortar una patata por la mitad y frotarla por los cristales de tu coche. El almidón que desprenden las patatas actuará como repelente al hielo.
La segunda solución casera se consigue mezclando agua y vinagre y rociando los cristales de tu coche con dicho ungüento. Las propiedades del vinagre harán más difícil la creación de placas de hielo.
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