Jueves, 19 de agosto 2021, 19:36
Es fundamental durante la época estival tener el aire acondicionado es la mejor condición posible, sobre todo si vives en lugares calurosos. Los viajes por carretera se pueden hacer muy largos en verano (aunque sean trayectos cortos) si no podemos activar el aire en nuestro coche, lo que hará que las altas temperaturas exteriores accedan al interior de nuestro vehículo y nos hagan la vida imposible.
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Si quieres evitar que el aire acondicionado se averíe o no enfríe bien, para que todas las veces que conduzcas este verano sean placenteras, te dejamos 5 consejos expuestos por la DGT y que recientemente ha recuperado la web autopista.es.
No es nada recomendable poner el aire del coche al máximo nada más entremos al interior del vehículo. Lo conveniente es primero ventilar el coche para bajar la temperatura del interior del mismo, y ya cuando este proceso se haya completado podremos activar el aire acondicionado.
Otra función que no debemos activar pronto es la de recirculación del aire por el interior del vehículo. Esto puede hacer que los cristales se empañen por el propio cambio brusco de temperatura. La DGT recomienda mantener seleccionada la opción Auto del sistema del aire acondicionado, ya que permite que “el flujo del aire se autorregule, sea más homogéneo y se haga un uso más eficiente”.
Hay situaciones en verano como las noches o las mañanas en que no activamos el aire porque no hace el calor suficiente y así de paso ahorramos combustible. Pues bien, este acto también es una mala práctica, ya que la Dirección General de Tráfico aconseja en verano siempre activar aunque sea de forma suave el sistema del aire acondicionado del coche (se evitará que se empañe cuando se eleve la temperatura exterior).
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Cada uno llevamos en nuestro coche los difusores orientados a nuestro gusto para estar durante todo el trayecto lo más cómodos posibles. Un reparto adecuado del aire con los difusores hará que este funcione mejor y para ello, “los difusores tienen que estar enfocados hacia arriba, no hacia la cara”. Esto logra que el aire se reparta por todo el coche y llegue a todos los pasajeros uniformemente.
Al no ser el aire acondicionado un sistema esencial para el coche, muchas veces nos olvidamos de él y obviamos su mantenimiento. Pues bien, si queremos que funcione de forma óptima, hay que cuidarlo. Sería conveniente realizar una carga del aire cada dos o tres años, además de cambiar los correspondientes filtros cada 15.000 o 20.000 kilómetros, según los expertos.
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