Lunes, 22 de junio 2020, 11:00
El refresco de cola es el más común de esta gama de bebidas en nuestra nevera. Si no los tomamos de manera periódica y los tenemos abiertos el gas se 'pierde' y deja de tener esa gracia tan especial... Sin embargo, no debes tirarlo. Puedes reutilizar el refresco y convertirlo en un aliado antimanchas del hogar. La fórmula de este popular refresco es todo un secreto pero el ácido fosfórico con un nivel de pH de 2,8 la convierte en un perfecto aliado a la hora de desengrasar y limpiar. A continuación te contamos cinco trucos que te ayudarán en tus tareas del hogar:
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LIMPIADOR DE BAÑO
El refresco puede ser muy efectivo a la hora de limpiar el aseo y, en especial, el inodoro. Tan sólo hay que verter el producto sobre la taza del retrete y dejarla actuar durante una hora más o menos. Después, elimina el producto con paño. El resultado te sorprenderá y el baño brillará como si lo acabases de reformar.
ADIÓS A LAS MANCHAS DE GRASA
¿Tienes una mancha en las cortinas, cojines o sábanas? El refresco de cola es la solución perfecta para eliminar manchas difíciles. En este truco de limpieza tan sólo tienes que vaciar una lata de refresco junto con el detergente habitual y, después, lavar como lo realizas habitualmente.
No obstante, debes tener en cuenta que no debes emplear este producto en telas delicadas dado que el color oscuro de la bebida puede empeorar la situación.
LIMPIAR OLLAS
La limpieza de ollas y sartenes ennegrecidas por la acumulación de suciedad puede ser una ardua tarea. Lo que debes hacer para que esta limpieza sea más eficaz es verter una lata de Coca Cola sobre la cazuela "quemada" y dejarla hervir a fuego lento durante una hora. Después, límpiala y verás el sorprendente resultado.
ADECENTAR JUNTAS
La Coca Cola es un producto que es muy efectivo para limpiar azulejos y juntas de bañera. Sólo hay que pasar una toalla empapada en el refresco y dejarla reposar unos minutos. Tras esto, limpia la zona con un trapo húmedo.
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ÓXIDO DE LAS HERRAMIENTAS
Si quieres limpiar las herramientas para que queden como nuevas, hay que sumergirlas en un recipiente con el refresco. Después, frótalas y el óxido desaparecerá por el ácido fosfórico de la Coca Cola.
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