Cómo usar el horno sin que la factura de la luz se dispare

Con el precio de la luz disparado por la invasión de Ucrania, es importante controlar el consumo de electricidad. Sin embargo, pese a ser uno de los electrodomésticos que más gasta, esto no quiere decir que no podamos usar el horno para cocinar sin llevarnos las manos a la cabeza cuando recibamos la factura de la luz.

Simplemente hay que seguir algunos consejos, como cocinar varios platos a la vez. Jugando con las distintas alturas, asaremos así diferentes alimentos ahorrando dinero, energía y tiempo. Y cuanto más pequeños sean los trozos en los que estén cortados, más rápido será todo. Además, es importante no abrir la puerta mientras se hornea la comida, ya que bajará la temperatura con la consiguiente pérdida de eficiencia.

También es importante aprovechar el calor residual, que permitirá calentar otros alimentos en lugar de usar únicamente para ello el microondas. Del mismo modo, es importante apagar el horno 5 minutos antes de acabar de cocinar, puesto que así acabaremos la receta antes de que se pierda la temperatura.

Y aunque parezca mentira, la limpieza y el mantenimiento adecuados del horno mejoran mucho su ahorro energético. De hecho, si está muy sucio, la temperatura podría no distribuirse de manera homogénea dentro del electrodoméstico. Por otro lado, es importante usar recipientes adecuados para cada horneado.