Domingo, 10 de abril 2022, 23:18
El diestro salmantino Álvaro la Calle ha solventado con gran dignidad la tarde en la plaza de Las Ventas de Madrid donde ha tenido que estoquear cinco toros después de que Emilio de Justo, que se anunciaba con los seis en solitario en el primer gran acontecimiento taurino de la temporada, cayera herido de gravedad en la suerte suprema del primero de la función, sufriendo una grave lesión en las cervicales que le impidió continuar la lidia y que le tendrá alejado de los ruedos “como mínimo dos o tres meses”, según apuntó el cirujano de Las Ventas, Máximo Garcia Padros tras conocer el informe de la resonancia que se le practicó de urgencia y que desveló sendas fracturas de las cervicales C1 y C2 y una fisura en la base del cráneo.
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Álvaro de la Calle, que actuaba de sobresaliente, se quedó en solitario con los cinco toros que aún aguardaban en los corrales. Dio la vuelta al ruedo tras la muerte del cuarto, con el hierro de Victoriano Del Río, que resultó un toro excelente que también fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. Estuvo aseado con el noble de Domingo Hernández, templado con el apagado de Victorino Martín, con más dudas con el deslucido de Palha que hizo quinto, que además le volteó a la hora de entrar a matar, y asentado con el bondadoso de Parladé que cerró la función y al que había recibido a porta gayola. El diestro salmantino manejó la espada con eficacia en toda su actuación y dio una imagen de torero solvente y capaz.
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