Jueves, 22 de abril 2021, 17:51
El recluso que en diciembre de 2019 fue sorprendido en Topas con cannabis, heroína y dos teléfonos en el recto ha sido condenado este jueves por la Audiencia Provincial de Salamanca a tres años de cárcel por un delito contra la salud pública por tráfico de drogas y al pago de 1.800 euros de multa, con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago de tres meses.
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Aunque inicialmente el Ministerio Fiscal solicitaba para el preso —actualmente interno en otro centro— una pena de cuatro años de cárcel, las partes han llegado a un acuerdo por el que el acusado, de iniciales J.M.M., ha reconocido los hechos y ha aceptado la mencionada pena.
Así, los magistrados han considerado probado que el 12 de diciembre de 2019, alrededor de las 19.00 horas, el acusado concluyó un vis a vis con su familia y fue requerido para ser sometido a un cacheo y posterior exploración radiológica.
Ante ello y de manera voluntaria, el recluso expulsó de su recto un total de doce bellotas y dos envoltorios que contenían droga, así como dos teléfonos móviles. La sustancia, que fue analizada posteriormente, resultó ser cannabis y heroína, con un peso total de 112,92 gramos el cannabis y de 3,2 gramos la heroína. El acusado portaba las sustancias con la finalidad de introducirlas en el penal y distribuirlas a terceras personas.
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