Lunes, 1 de febrero 2021, 14:10
La Guardia Civil ha interceptado a un conductor que circulaba por la autovía A-66, a su paso por Topas, a 211 kilómetros por hora. Los hechos han tenido lugar este viernes por la noche, en pleno toque de queda, y tras pasar a disposición del Juzgado de Guardia, el conductor, de iniciales V.M.A.C.G. y de nacionalidad portuguesa, ha aceptado la pena solicitada en un juicio rápido: 10 meses sin carné más la correspondiente multa.
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Según ha podido saber LA GACETA, sobre las 21.00 horas de este viernes, el radar del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil detectó el turismo Mercedes Benz 220 GLC, con matrícula portuguesa, circulando por la autovía A-66, sentido Sevilla, en el término de Topas. Lo hacía a una velocidad de 211 kilómetros por hora cuando la velocidad permitida en la vía es de 120 km/h.
Apenas 20 minutos después, una patrulla pudo detener el vehículo a la altura del kilómetro 269 de la A-62, sentido Portugal, en el término de Robliza de Cojos.
Su conductor, de 38 años y con domicilio en Portugal, fue detenido por un delito contra la seguridad vial, al exceder en más de 80 km/h la velocidad fijada.
Tras pasar el fin de semana a disposición del Juzgado de Instrucción número Cuatro de Salamanca, en funciones de guardia, el conductor no declaró ante el juez, aceptando directamente la pena que le solicitaba el fiscal: 10 meses sin carné y el pago de una multa. El conductor ha podido acogerse así a la rebaja en un tercio de la pena al aceptar la pena solicitada en un juicio rápido.
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