Lunes, 17 de enero 2022, 11:22
Cuando todo parecía más o menos resuelto de cara a las oposiciones de maestros de 2022, con un decreto que modifica los criterios para celebrar las pruebas selectivas y en la que se daba más peso a la experiencia, lo que beneficia a los que llevan más años de interinos, el panorama vuelve a llenarse de dudas. El culpable en esta ocasión es el Ministerio de Educación, que parece haber pospuesto la fecha para la aprobación de la nueva norma, lo que complica que pueda aplicarse en el proceso que debe comenzar a finales de junio.
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La intención del Gobierno, según ha recogido El País, es la de aprobar el decreto en abril, más tarde de lo que preveía, que era durante este mes de enero. El aplazamiento tiene importantes consecuencias. El decreto indica que los nuevos criterios para convertirse en docente de carrera deben aplicarse a las oposiciones de 2022, 2023 y 2024. Sin embargo, si el Consejo de Ministros retrasa la aprobación hasta abril, muchas de las autonomías ya habrán publicado las convocatorias de las oposiciones, por los que se regirán por la antigua normativa.
De hecho, varias regiones han afirmado ya que no van a esperar hasta abril para convocar los procesos selectivos, un grupo en el que por ahora no se encuentra Castilla y León. La Consejería de Educación ha indicado que está estudiando esta situación, aunque remarca que tomará la decisión “más beneficiosa para los opositores”.
Sindicatos como CSIF consideran que, por una cuestión de tiempo, la convocatoria de las oposiciones no se puede retrasar más allá de finales de marzo. Más tarde de esta fecha no da tiempo a respetar los plazos administrativos y gestionar un procedimiento al que se presentan más de 10.000 personas en Castilla y León. Además, en el caso de la Comunidad, la celebración de las elecciones autonómicas complica aún más el proceso.
El nuevo decreto se enmarca dentro del proceso de estabilización que pretende el Ministerio de Educación y que consta de dos partes. Por un lado habrá un concurso excepcional para las plazas que lleven ocupadas de manera temporal desde antes del 1 de enero de 2016. Por otro, en 2022, 2023 y 2024 el proceso de selección será un concurso-oposición que introduce importantes cambios. El examen costará del desarrollo de un tema, más la presentación de una unidad didáctica. En algunas especialidades podría haber prueba práctica. No hay que aprobar todas las pruebas para pasar al concurso, aunque hay que sacar un 5 de media. El concurso se barema en 10 puntos y tendrá un peso del 40% en la nota final. 7 se podrán adquirir por experiencia, 2 por formación académica y 1 por otros méritos, de los que hasta 0,75 por oposiciones superadas.
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