Lunes, 28 de marzo 2022, 14:09
Más comunidades de vecinos han tenido que apretarse el cinturón en las últimas semanas para intentar controlar los gastos. El alto precio del gasóleo para calefacción, que al igual que el resto de combustibles se ha disparado en el último mes, ha provocado la adopción de medidas urgentes, como el recorte de horas de calefacción, para evitar el pago de derramas especiales o un aumento de las cuotas vecinales.
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La reducción de horas de calefacción ha sido posible también por las alturas del año, en las que el frío ya es menos intenso por las noches y a primera hora de la mañana, lo que ha propiciado que las comunidades que han elegido esta opción decidieran apagar las calderas por la mañana, generalmente, o bien apagarlas antes por la noche.
La medida, no obstante, ya había empezado a utilizarse en algunos edificios desde antes, porque los precios se encontraban altos previamente a la invasión rusa de Ucrania. Prueba de esto es que en enero el consumo de gasóleo calefacción ha registrado el mínimo desde hay que datos, con poco más de 3.500 toneladas, 500 menos que hace un año.
La alternativa del resto de comunidades que utilizan el gasóleo para calefacción ha sido la de aumentar las cuotas vecinales, o bien aprobar una derrama especial para hacer frente al aumento del combustible.
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