El Hospital de Salamanca acaba de incorporar una nueva técnica endoscópica con la que tratar la enfermedad de ‘esófago de Barret’ que afecta -se calcula- a cerca de 8.000 salmantinos, pero que solo se trataba en Burgos y en el Río Hortega de Valladolid.
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El nuevo equipamiento llegó a Salamanca hace pocos días -este mismo mes- y de momento ya se ha tratado a dos pacientes que padecían esta enfermedad que puede degenerar en un cáncer letal.
Ciudadanos Salamanca destacó que la llegada de este equipo responde a “años de presión política” de los naranjas. La procuradora en las Cortes María Montero recordó que tanto Manuel Mitadiel como David Castaño ya reivindicaron este tratamiento para Salamanca cuando se encontraban en la oposición y destacó que ahora que Cs rige la sanidad de la Comunidad, ha realizado un ejercicio de coherencia: “Cuando Ciudadanos está en la oposición reclama servicios para la ciudadanía y cuando está en el gobierno, lo cumple”.
La enfermedad del esófago de Barret está relacionada con la acidez y el reflujo constante, lo que provoca una lesión del esófago que, a la larga, puede degenerar en un letal cáncer de esófago. “Se estima que el 3% de la población la padece, aunque la mayoría de la gente lo desconoce”, asegura el presidente de la Asociación Esófago de Barret, Juan Carlos Hernández.
Se diagnostica y resuelve mediante endoscopia y en los primeros días ya se ha tratado a dos pacientes salmantinos
“Ahora ya tenemos la solución en el Hospital de Salamanca, por lo que la preocupación es diagnosticar a todos los que no lo saben. Si se sabe que lo tienes se puede curar, pero si no lo sabes y evoluciona...”, advierte Juan Carlos Hernández, que cifra en “cerca de 6.000” los salmantinos que -por estadística- padecen este problema y todavía no han sido diagnosticados.
El presidente de la asociación de enfermos sugiere que un buen método para sospechar que se padece este problema es “tener reflujos dos o tres veces al día y durante varias semanas. De ser así conviene consultar el médico de familia para que te deriva al especialista de Digestivo”.
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La concejala en el Ayuntamiento de Salamanca, Ana Suárez, añadió que “este tratamiento no solo beneficiará a los salmantinos, sino también a pacientes de Ávila y Zamora con un diagnóstico que supone la curación en la mayor parte de los casos. Contar con él en Salamanca supone para muchos enfermos y sus familias el fin del sufrimiento que implica una enfermedad de cáncer”.
En el año 2016 Ciudadanos preguntó por la cantidad de pacientes que sufrían este trastorno en Salamanca, las listas de espera existentes y la posibilidad de trasladar los equipos de una provincia a otra para no tener que movilizar a los pacientes. La respuesta de la Consejería fue que no se trata de una tecnología portátil como para moverla de un hospital a otro. El por entonces procurador y ‘preguntador’, Manuel Mitadiel, es el actual Gerente Regional de Salud y ha obrado la llegada de esta técnica endoscópica al Complejo Asistencial de Salamanca.
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La técnica que previene el tumor
El funcionamiento de esta técnica es, salvando las distancias, similar a cuando una endoscopia diagnóstica encuentra un pólipo y lo extirpa antes de que de pueda volverse maligno. “A través de una endoscopia se puede ‘quemar’ esa parte del esófago en el que se ha producido la herida. Quema 3 ó 4 capas que luego se caen y después se regeneran ya sin la enfermedad. Es decir, desaparece la enfermedad que puede terminar en un cáncer, aunque sigue el problema del reflujo. Eso quedaría como un problema crónico, pero que se puede medicar y con el que se puede convivir”, opina el presidente de ASENBAR.
El Barret es una lesión precursora del adenocarcinoma de esófago, que es uno de los 10 cánceres más frecuentes del mundo y que tiene una alta letalidad. Aún así, se trata de un tumor asintomático en sus primeras fases. Como sucede con otros cánceres, cuando la persona afectada se da cuenta suele ser tarde. En cambio, si se detecta a tiempo es fácil de detectar con una endoscopia y se puede curar de la misma forma.
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Los afectados por esta enfermedad consideran clave que se informe a los pacientes que en alguna ocasión hayan notificado problemas de reflujo, ardor y acidez de estómago para que se sometan a esta prueba diagnóstica de forma preventiva.
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