Viernes, 8 de abril 2022, 13:44
Las Urgencias del Hospital de Salamanca han perdido a diez médicos -entre bajas y traslados- en los últimos diez días, por lo que la planificación de la Semana Santa se presenta bastante complicada.
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La situación ya es preocupante porque en las últimas horas ya han renunciado a sus contratos de renovación varios profesionales, pero según apuntan los propios facultativos “hay otros compañeros que, posiblemente, se marchen en los próximos meses” y que la desbandada sea aún mayor.
El principal motivo de este éxodo es que encuentran mejores condiciones en Atención Primaria, aunque rascando en la explicación aparecen otras razones más concretas.
“Es sencillo. Estamos saturados y agotados”, afirman desde el Hospital de Salamanca. Los médicos de Urgencias consideran que están ‘pagando’ las demoras para conseguir una cita en Atención Primaria: “Si alguien tiene un dolor o una preocupación y el médico de familia no le da cita hasta dentro de cinco días, o más, se planta en Urgencias. Estamos viendo cientos de patologías banales, que deberían ser resueltas en Primaria, pero que acaban en el Hospital”, indican.
Lo cierto es que, según las estadísticas que publica la Consejería de Sanidad, la prioridad media de los cientos de casos que atiende el Hospital cada día es de 3,5 dentro de una escala en la que 1 es un paciente muy grave y 4 es una patología que en realidad no es urgente.
A la situación de las Urgencias hospitalarias se suma otro condicionante: la reciente resolución de una OPE de Atención Primaria en la que muchos de los urgenciólogos han conseguido plaza fija. “Está pendiente una resolución de plazas de Urgencias, posiblemente para junio, pero como ha salido antes la de Primaria, la gente la va a coger para asegurarse una plaza fija. Si después sale la de Urgencias y logran un puesto puede que se planteen volver, pero de momento esa gente se pierde”, explican entre los más veteranos.
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El traslado de Urgencias a Primaria llevará a un médico a Ciudad Rodrigo, dos a Béjar, dos a Santa Marta, otra a Zamora... Pero es que otro profesional más ha conseguido plaza en Zamora y lo está meditando y en ‘segunda ronda’ están esperando su turno de salida otros dos facultativos.
Para complicar más la organización se suma otro factor: la jefatura de servicio y las relaciones personales entre compañeros. Sacyl todavía no ha anunciado quién de los cuatro candidatos tomará el relevo del fallecido Rafa Borrásy se pondrá al frente del servicio, pero algunos profesionales ya han advertido que en función de quién sea el jefe -o jefa- se plantearán seguir o marcharse.
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Entre los urgenciólogos consultados por este diario coinciden en que “una solución a largo plazo para estas crisis es que exista una especialidad MIR de Urgencias”, y explican: “Aquí no tenemos residentes propios a los que poder fidelizar cuando terminan. Aquí la gente está de paso. Son internistas o médicos de familia, en su mayoría, que en cuanto sale una plaza de su especialidad se marchan. Cuando seamos una especialidad MIR, los médicos que lleguen a Urgencias lo harán porque realmente lo han elegido y seguirán aquí cuando sean adjuntos”, confían.
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