La Plaza Mayor de Salamanca ha acogido en la mañana de este sábado la celebración del día del anestesiólogo, una práctica que cambió la medicina. Motivo de esta festividad se ha hecho una demostración de cómo habría que actuar si nos encontramos a una persona en parada cardiorespiratoria, aplicando la maniobra RCP básica.
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El proceso es muy sencillo: en primer lugar buscaremos un lugar seguro para atender a la persona, llegando a desplazarla si fuese necesario. El segundo paso es comprobar su nivel de consciencia, con pequeños golpes en el hombro para ver la reacción del afectado. En caso de caso unísono, hay que comprobar si respira, con la maniobra frente - mentón (colocando la cabeza en esa posición comprobaremos si respira) y con la maniobra ver - sentir. En caso de no respirar, avisaremos al 112 y seguidamente comenzaremos la reanimación cardiovascular con compresiones torácicas. Una vez estén los sanitarios, ayudaremos siguiendo sus instrucciones.
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