El turismo de toda la vida, aquel que impávido sigue llamando a masas de turistas, encuentra su adalid en el Pozo de los Humos de Pereña de la Ribera, así como en el nada desdeñable Pozo del Airón, exuberantes en esta época del año. También destacan las vistas desde lo alto de la ermita, y los diversos trazados señalizados que dibujan el entorno. Pero este turismo que embriaga a todo el mundo se ve complementado por los encantos de otra índole, aquel arte, que lejos de basarse en las maravillas de la naturaleza, atañe a las proezas del hombre.
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La localidad de Pereña, enclavada en Las Arribes, adorna desde hace unos años su centro urbano con emotivos e impactantes murales que salen al encuentro de un turista inesperado, narrando desde la expresividad de los rostros reflejados en la pintura, tradiciones y culturas que deben perdurar.
A través de “EnPereñArte”, la villa expone al aire libre, sugiriendo una ruta urbana distendida y enriquecedora, obras de artistas internacionales. Una de las más recientes, fuera del ya conocido concurso, reivindica incluso la lucha contra la violencia de género, colocando a este hermoso pueblo a la vanguardia en arte y valores.
Contenido patrocinado por el Ayuntamiento de Pereña de la Ribera
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