Jueves, 16 de abril 2020, 13:18
El pasado 25 de marzo Tomasa Criado cumplió 102 años, en pleno confinamiento y en la residencia pública de Ledesma donde está “tranquila”. Sus familiares no han podido todavía felicitarla en persona, pero esperan poder hacerlo “en breve, cuando pase todo. Sabemos que todos están aislados y hablamos con ella a veces por teléfono”.
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Tomasa se casó en Ledesma, en Santa María La Mayor, y vivió en Vega de Tirados, ayudando su marido en las labores de la huerta. Tuvo 2 hijas aunque una falleció en 2004, Una década antes, al enviudar, se trasladó a vivir a Rollán, donde residió durante 14 años.
En junio de 2008 ingreso en la residencia municipal de Ledesma en la que sigue viviendo actualmente. Entre sus devociones están el Cristo de Cabrera, la Virgen de la Salud y del Cristo de las Aguas.
En general asegura que su estado de salud es “bueno” y le falla a veces el oído. Le encantan las legumbres y los productos de la matanza de los que disfruta cuando se los llevan sus familiares. Los dulces y el chocolate siguen estando entre su comida favorita y los degusta “de vez en cuando”, asegura.
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