Imagen de la terraza de un local en Guijuelo con el cartel de “Se traspasa”. TEL

Los hosteleros de los municipios con nuevas restricciones hablan de “caza de brujas”

Los hosteleros se quejan de que se demoniza al sector | En algunos municipios las restricciones apenas se notarán ya que no cuentan con comercio y los bares están cerrados

Lunes, 1 de febrero 2021, 10:04

Aunque los alcaldes afectados por las nuevas restricciones impuestas por la Junta en once municipios salamntinos se muestran comprensivos, no ocurre lo mismo con la hostelería y el comercio, que no ocultan su perplejidad y llegan a calificar esta decisión de “caza de brujas”. Otros, los más pequeños, apenas notarán las restricciones ya que los bares llevan cerrados varias serranas.

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Son los establecimientos de hostelería los que salen peor parados por la decisión de la Junta. José Corredera Sánchez, propietario de un bar-restaurante en Ciudad Rodrigo, recalca la situación de incertidumbre. “Cada día es una medida nueva, nos vuelven locos, ya no sabes ni a qué hora tienes que cerrar, es un auténtico despropósito”. Además asegura que su sector paga las consecuencias de la pandemia: “ahora mismo me siento como un criminal”.

En los municipios más pequeños la mayoría de los establecimientos de hostelería ya estaban cerrados

Otros establecimientos de esta índole ya cerraron sus puertas hace tiempo, como es el caso del pub de Juan Ignacio Alonso, cuya actividad repunta a partir de la hora del toque de queda. En Ituero de Azaba los bares han seguido la misma dinámica. “Las medidas llegan ahora pero los bares ya llevan tiempo cerrados”, señalan.

“Nos van a matar”, indicaba ayer una hostelera de Guijuelo tras conocer el nuevo cierre de su terraza. Un sentimiento compartido por otros compañeros y por los comerciantes. Algunos de ellos consideraban que el cierre a las seis de los negocios no esenciales no va a implicar que la gente se encierre en casa: “mucha gente va a salir a pasear entonces hasta el toque de queda de las ocho”, sentenciaba uno. En el caso de Béjar, algunos hosteleros piden que la Junta “programe los cierres” porque “abrirlo cuesta dinero pero cerrarlo, también” y añaden que “son muchas pérdidas económicas y nos están ahogando poco a poco”.

Dos son las terrazas de hosteleros que deberán cerrar en Valdecarros, mientras que en Encinas de Arriba ya tenían sus dos bares cerradas. Pedrosillo tenía uno abierto y el otro ya cerrado.

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