Los colores se apoderaron de las calles en el comienzo de fiestas de Almendra

Casi más propio de un Carnaval que de una actividad de festejos. Los vecinos de Almendra demostraron ayer su implicación con las fiestas de su pueblo en el concurso de disfraces del municipio, el primero de los grandes actos de los tres días de fiestas. El ambiente enérgico y jovial se palpaba en las calles, teñidas de imaginación, humor y magia.

Niños, jóvenes y familias. Todos acudieron al encuentro para participar a nivel grupal o individual. Almendra rebosaba vida en un despliegue de personajes y homenajes: Buscando a Nemo, el grupo de rock Kiss, la escudería Ferrari inmersa en la Fórmula 1, jamones ibéricos de calidad, y hasta ropa interior masculina a modo de máscara. Las ideas más insólitas desfilaron por las calles precedidos por zancudos de vértigo, marcando el compás con alegría.

Los tejidos de tul y las combinaciones de colores imposibles dieron paso a premios de hasta 150 euros, una cifra nada desdeñable para un concurso en el que, como mínimo, todos ganan, aunque no se trate de dinero, sino de diversión y una experiencia de armonía entre el pueblo y sus gentes.

El concurso y pasacalles llegaban así, con los ánimos elevados, después de un intenso certamen de pesca matutino que también repartió premios, y una misa al son de la gaita y el tamboril. La fiesta continúa dos días más.