La naturaleza deja un espectáculo natural en la Sierra de Béjar

La Sierra de Béjar es un verdadero espectáculo natural durante todo el año pero, quizás, tiene dos momentos de especial belleza.

El primero, como no, es en invierno con la nieve sobre las montañasdejando unas impresionantes vistas del manto blanco ideal para esquiar o realizar rutas con raquetas. Y el segundo momento de gran belleza en la Sierra de Béjar es ahora, en primavera. La floración del piorno, conocido popularmente como ‘escobas’, ofrece un espectáculo de la naturaleza similar a los cerezos en flor en el cercano Valle del Jerte.

Un manto amarillo cubre en estos días las cotas medias de las montañas de la Sierra de Béjar en una estampa de gran belleza visible desde distintos puntos de la comarca pero que, una vez arriba, es más impresionante aún.

Para ello, es necesario acceder hasta esa zona de la Sierra de Béjar. Se puede realizar a pie a través de la ruta que comienza en el paraje de Los Pinos para ascender después a la Garganta del Oso hasta el Canchal Partido para acceder a La Covatilla y, finalizar después en el Pico Alaiz, donde se encuentra la imagen de María Auxiliadora. Se trata de una ruta de unos 16 kilómetros de longitud, con una dificultad alta, aunque existe otra manera de disfrutar de la floración.

La segunda propuesta permite acceder en coche hasta el kilómetro 8 de la carretera de acceso a La Covatilla para localizar allí una entrada que da acceso al Pico Alaiz. Durante todo el recorrido de la carretera, los piornos en flor ya dejan una bella imagen de la floración pero, a medida que avanza el recorrido, las vistas son más espectaculares.

La floración se encuentra, en la actualidad, en las cotas medias de las montañas bejaranas e irá avanzando hasta la parte superior en las próximas semanas por lo que es ahora un momento ideal para realizar ese recorrido y disfrutar. También es posible divisar los piornos en flor en la parte de la Sierra en el término municipal de Candelario en la zona de la Plataforma de El Travieso.

Para finalizar, es conveniente advertir que las escobas en flor pueden causar malestar a las personas alérgicas.

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