Sábado, 27 de abril 2019, 22:04
Villoria se convirtió ayer tarde en el epicentro de la afición taurina y en la localidad, literalmente, no cabía un alfiler ya que, según las primeras estimaciones, se calcula que cerca de 4.000 personas llenaron sus calles para seguir de cerca la esperada V edición del Toro del Voto.
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El comienzo del festejo popular estaba anunciado para las 17:00 horas pero en esos momentos seguía la masiva afluencia de público buscando aparcamiento en unos casos y en otros acomodo entre las talanqueras del recorrido por lo que se retrasó media hora. Al son de la charanga, los miembros de la Comisión del Toro del Voto acompañaron metido en un cajón al primer astado desde la plaza de toros de la Vega hasta el inicio del recorrido donde se soltó tras el aviso al público en forma de cohete.
“Sudanés”, de la ganadería de José Cruz, fue el primer protagonista de la tarde en salir a la arena que se había extendido en la calle Cañada durante las jornadas previas por parte de la organización en un esfuerzo por mejorar los detalles del encierro. Quites, quiebros y carreras se sucedieron a partir de ese momento tanto en la calle Cañada, como en la calle los Robles hasta llegar al coso de la Vega en cuyos tendidos se congregaron, también, varios cientos de espectadores. El intenso calor de la tarde también se dejó sentir y “Sudanés” regresó a los corrales de la plaza de toros para dar paso al segundo de la tarde, un toro castaño del hierro de Pedraza de Yeltes, de nombre “Medicero”, que apretó más a los mozos en algunas carreras y derrotó en tablas a su paso por la Vega.
Durante casi dos horas el público siguió atentamente cada detalle del Toro del Voto y a pie de recorrido también pudo verse al alcalde, Julián Barrera, acompañado en varios momentos por el también diputado provincial Jesús María Ortiz. La Comisión del Toro del Voto quiso que los espectadores tuvieran, además, la oportunidad de presenciar una capea con la que se cerró el festejo en la plaza de toros.
El buen tiempo animó, además, a muchos a prolongar la tarde en Villoria y las terrazas de los establecimientos de hostelería situados en la avenida de Las Villas, que divide en dos el casco urbano, se llenaron sobre todo de jóvenes.
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Las fiestas chicas villorejas en recuerdo del voto a Santa Bárbara, por librar de todo mal hace 170 años a los vecinos que estaban en la iglesia en el momento de caer el rayo de una tormenta, siguen mañana, Lunes de Aguas, con la misa que amenizará el coro local Albahaca a las 12:00 horas en la parroquia y a la que seguirá la procesión con la imagen de la santa.
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