Doñinos logra una moratoria de dos años más para desarrollar su nuevo polígono industrial

Hasta finales del 2024. Ese es el nuevo plazo máximo que tiene para su puesta en marcha el nuevo polígono industrial de 13 hectáreas en la localidad de Doñinos, en la zona conocida como Mirador del Montalvo.

La zona estaba pendiente de un cambio por parte de la Junta, que ya se ha producido y ha permitido ampliar en dos años el tiempo para poder llevar a cabo el desarrollo de este recinto. La normativa en vigor hasta hace pocas semanas marcaba que de no estar ya desarrollado el espacio industrial el suelo se descatalogaría y debía volver a ser rústico y los nuevos plazos hacen que se esquive esta modificación para dar una oportunidad de desarrollo.

A comienzos de este año el Ayuntamiento dio el visto bueno para la zona industrial, que estará ubicada a dos kilómetros del casco urbano del municipio, en la carretera de Santizañez del Río, entre el río Tormes y la carretera DSA- 504, que va de Salamanca a Florida de Liébana.

Se trata en este caso de una iniciativa privada que ocupa una parcela paralela al sector UR-I3, ya desarrollado con otras doce hectáreas. La construcción del nuevo polígono industrial de Doñinos ocupará una superficie global de casi 135.000 metros cuadrados, situados en una zona privilegiada por su cercanía a otro de los polígonos de la localidad y unas excelentes comunicaciones con enlace a las autovías A-62 y A-66 y la carretera nacional N-620.

El proyecto de urbanización del polígono fija que su desarrollo no ocupará más de un máximo de dos tercios de la superficie total ordenada, dejando el resto para espacios verdes y zonas comunes o dotacionales. “No tendrá coste para el municipio”, aseguró el regidor, Manuel Hernández. El proyecto contempla, además, 650 aparcamientos públicos, de los que al menos 17 serán plazas para movilidad reducida.

Las parcelas, que en principio estaban pensadas para poder acoger empresas de tamaño medio, se han estructurado de manera que ahora las destinatarias serán industrias que requieran muchos metros cuadrados, puesto que se han dividido en una de 20.000 metros cuadrados y otra de 30.000, además de modificarse la altura máxima para las naves industriales, todo con el objetivo de resultar atractivas a las empresas de logística.

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