EL invierno lleva siete años acercándose... «Winter is coming» (el invierno se acerca), es posiblemente la frase más conocida de la serie “Juego de Tronos” ... y que significa: hay que estar preparado para lo malo.
Publicidad
Mis queridos lectores, el invierno se acerca...
Esta frase tan conocida me ha dado pie para participarles a todos de una reflexión y, por qué no decirlo, de una preocupación. Este ojo que observa, ojo extraño porque también oye, lleva tiempo oyendo en los diferentes medios, a los analistas y a los expertos, que se avecina “un frío y obscuro invierno” y no precisamente meteorológico pues será de escasez, subida de precios, desabastecimiento, paro...
¿Qué es lo que está pasando? No es la primera vez que comparto con ustedes la idea de que el mundo asiste a un tremendo cambio de paradigma. Todo parece estar cambiando a velocidad de vértigo. En los tiempos pretéritos, las regulaciones en el mundo se llevaban a cabo por medio de las guerras. Si bien es cierto este aserto, no olvidemos que la guerra siempre es el efecto último de la pérdida de otras batallas como la financiera o la política, en definitiva de la guerra por el poder en su más “amplio espectro”. Nosotros en los últimos años estamos asistiendo a gravísimas crisis como la financiera, la económica, la política, la sanitaria, ahora la energética... y las que están ya asomando por el horizonte como la alimenticia, la del desabastecimiento, la del transporte...
Parece como si ahora se estuviera dirimiendo una gran batalla de poder en un nivel que la gran mayoría no vemos ni entendemos, pero que estamos sufriendo y vamos a seguir sufriendo sus consecuencias. Puede ser que se estén llevando a cabo increíbles luchas de poder mundial, en otras dimensiones donde no corre la sangre físicamente por ahora, pero donde las distintas fuerzas están sumiendo a grandes sectores de la población en la pobreza y cambiando los ejes del poder mundial. Si realmente nos paramos a pensar, somos actores de un plan donde, aparentemente, nada podemos hacer para cambiar el rumbo de los acontecimientos. Y mientras esto sucede, nuestros dirigentes y políticos, todos, están jugando al despiste y en vez de centrar sus esfuerzos y recursos donde es necesario, se entretienen con el papel de un paquete que son incapaces de abrir. Creerán que si lo ignoran, desaparecerá por arte de magia. Hay una máxima que dice “nada es casual” y claro que no lo es, pero parece que todo nos lleve a pensar lo contrario, por algún que otro interés soterrado, de vaya usted a saber quién. Lo que está claro es que nada está claro, pues incluso el propio planeta también está en desacuerdo con el devenir de todos y cada uno de los acontecimientos que estamos viviendo.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.