Dónde habrán quedado aquellas Semanas de la Movilidad en las que comenzábamos a concienciarnos de la necesidad de evitar el coche en una ciudad como ... es Salamanca. Desde hace más de 30 años se habla de sostenibilidad, aire limpio, energías y parques verdes, en definitiva, hablamos de salud. Y lo cierto es que no acabamos de despegarnos del volante porque los atascos persisten día tras día, la calidad del aire no es la mejor mientras año tras año celebramos esta Semana de la Movilidad que hoy concluye animando al uso del bus urbano.

Publicidad

Y es verdad la red de Salamanca llega prácticamente a todos los rincones con unos tiempos de recorrido que ciertamente son aceptables. Además, el precio del billete se ha reducido y nadie puede decir que este medio de transporte no esté al alcance de su bolsillo.

En este jueves prometo usar solo el bus o el coche de San Fernando. Una promesa que yo, personalmente, espero dar continuidad a lo largo del año. Salamanca es una ciudad cómoda en líneas generales, la red de carril-bici es ya muy importante sabiendo que en 10 minutos podemos cruzar de norte a sur sin mayores problemas.

Así pues, mi enhorabuena a aquellos “Amigos de la Bici” que invitaban a un café o chocolate tal día como hoy y además te regalaban el timbre para la bici. Ahí se abría un camino hace 30 años recogiendo el testigo el consistorio salmantino.

Publicidad

En este 2022 el tratamiento ha sido más pedagógico con la implicación de varias concejalías que, ciertamente, tratan de concienciar sobre un futuro que como estamos viendo, ya es presente. El cambio climático está aquí para quedarse y cada acto por pequeño que parezca es un paso positivo en esta lucha del planeta. Puede que la bici o los patines no sean lo nuestro, pero se pueden hacer muchas cosas más como seleccionar nuestros residuos, reducir el consumo de agua potable o simplemente caminar en vez de coger el vehículo.

De manera que el mensaje es claro debemos aportar el granito de arena sin esperar la medalla porque nos estamos jugando el futuro nuestro y el de los que vienen después. La naturaleza lo soporta todo pero el ritmo de estrés es tan fuerte que la cuerda se puede romper en mil añicos.

Publicidad

Por el momento, no solo me lo pienso, tengo que actuar, tenemos que pensar que lo de este verano de calor no ha sido una coincidencia, las estadísticas lo confirman: desaparecerá la primavera y el otoño para dar paso a tres estaciones, verano, invierno y la del tren.

Tenemos un pequeño margen para luchar contra ese cambio climático que hace que el ártico se derrita antes de tiempo provocando corrientes en los océanos que no son normales y provocando huracanes y borrascas impresionantes. Hoy finalmente, es día para concienciar y participar en las actividades que propone el Ayuntamiento de Salamanca. Mañana será día para actuar contra el cambio climático.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad